El seleccionador español masculino de baloncesto, Chus Mateo, defiende el carácter competitivo del jugador nacional y subraya la necesidad “imperiosa” de lograr la clasificación para el Mundial de Catar 2027.
El seleccionador español masculino de baloncesto, Chus Mateo, ha insistido en la importancia de “ser optimistas sin dejar de ser realistas” ante el futuro del combinado nacional. En una entrevista concedida a Radiogaceta de Radio Nacional de España (RNE), recordó que “el jugador español siempre ha tenido ese colmillo competitivo que no se va a perder” y remarcó la “imperiosa necesidad” de clasificar para el Mundial de Catar 2027.
Mateo señaló que la auténtica medalla para el baloncesto español será “hacer un buen plan de futuro” que permita mantener el nivel histórico alcanzado gracias al trabajo de clubes, entrenadores y jugadores. En esta línea, pidió “trabajar con cierta pausa, pero con equilibrio”, evitando decisiones precipitadas en el proceso de renovación.
El técnico explicó además su transición de entrenador de clubes a seleccionador. Reconoció que echa de menos el día a día del entrenamiento, pero subrayó que “elegir bien y con sabiduría a los mejores para representar a nuestra selección y a nuestro país requiere de cierta pausa”.
Mateo destacó que afronta con “muchísima ilusión” sus primeros días como seleccionador, con un plan de trabajo a corto plazo y una clasificación cercana. Las próximas ventanas en noviembre y febrero serán decisivas para acercarse al objetivo mundialista del próximo verano. Asimismo, resaltó la necesidad de dar paso a nuevas generaciones “que vienen pisando fuerte” como se observó en el último Europeo.
En este sentido, el exentrenador del Real Madrid prefirió no fijar objetivos de títulos de momento. “Las cosas hay que hacerlas con pausa y saber dónde estamos, saber que la historia del baloncesto español es muy grande y que todo se ha conseguido trabajando mucho y poniendo las bases”, afirmó.
Sobre el reciente Campeonato de Europa, Mateo señaló que “hemos visto jugadores que seguramente no han dado su mejor nivel” al asumir por primera vez liderazgos en la selección, al tiempo que “hemos descubierto jugadores jóvenes que han roto la puerta y quieren hacerse un sitio”.
El seleccionador mostró también su confianza en “la gente que siempre ha dado la cara por el baloncesto español en las ventanas”, a pesar de que en ocasiones se haya considerado a esos jugadores como de “segundo nivel”. Para Mateo, el nivel de esos encuentros clasificatorios ha sido muy alto y motivo de orgullo para el baloncesto nacional.
Por otro lado, reiteró su disposición a que Ricky Rubio regrese cuando lo desee: “Yo no puedo en ningún caso buscar su compromiso 100% ahora mismo, ni exigirle que él lo haga público. Cuando diga ‘Chus, quiero estar contigo’, a Ricky Rubio se le va a dejar seguro”.
Mateo también se refirió al liderazgo asumido por los hermanos Hernangómez tras la retirada de referentes como Rudy Fernández, Sergio Llull o Sergio Rodríguez. Consideró que “han tenido que liderar muy de sopetón” y defendió que se les permita vivir sus primeras experiencias en este papel.
Por último, Mateo elogió al joven base del Valencia Basket, Sergio De Larrea, MVP de la última Supercopa. “Fue fantástico ver que un joven de 19 años ha sido capaz de ser MVP de una competición como la Supercopa, con el nivel que había ahí”, apuntó.
El seleccionador destacó la serenidad del jugador en momentos decisivos: “Él va a la línea de tiro libre y no le tiembla la mano, parecía un veterano”. Al mismo tiempo, advirtió de que no hay que “exigirles más de la cuenta” y abogó por que los jóvenes disfruten del juego con la fortuna de encontrarse entrenadores que apuesten por ellos.
Con estas declaraciones, Mateo dibuja un horizonte de renovación pausada pero firme para el baloncesto español, combinando experiencia y juventud con el objetivo prioritario de asegurar la presencia en el Mundial de Catar 2027.