La línea C-5 de Cercanías gana 5,9 millones de viajeros en tres meses debido a las obras de la A-5

La línea C-5 del sistema de Cercanías Madrid, que conecta Móstoles-El Soto con Humanes, ha registrado un aumento de 5,9 millones de viajeros durante los tres primeros meses de refuerzo del servicio, una medida puesta en marcha como respuesta a las obras de soterramiento de la autovía A-5. Este crecimiento representa un incremento del 30% respecto al mismo periodo del año anterior, consolidando a la C-5 como la más concurrida de toda la red.
Entre el 13 de enero y el 12 de abril, esta línea acumuló más de 25,4 millones de pasajeros, frente a los 19,5 millones registrados en el mismo intervalo de 2024, según datos facilitados por Renfe. Este refuerzo de la oferta, que comenzó dos días antes del inicio oficial de las alteraciones por las obras, ha permitido gestionar el aumento de la demanda y mantener la normalidad del servicio a pesar de las incidencias puntuales derivadas de las huelgas convocadas en marzo y abril.
Un refuerzo clave para garantizar la movilidad durante las obras
Durante este periodo, Renfe aumentó la capacidad del servicio en hasta un 40% en determinadas franjas horarias, incorporando más de 42.000 plazas diarias adicionales. En paralelo, el número de circulaciones creció un 17%, lo que equivale a 3.679 trenes más respecto al mismo trimestre del año anterior, al pasar de 21.804 a 25.483 trayectos.
El refuerzo no solo incrementó la oferta de plazas, sino que también mejoró la regularidad del servicio. La frecuencia entre trenes subió 2,7 puntos porcentuales, situándose en el 89,5%, y el tiempo medio de paso entre trenes se redujo en casi dos minutos, facilitando así el flujo de pasajeros y la intermodalidad con otros medios de transporte.
Dispositivo operativo reforzado y coordinación con Metro
Para garantizar la calidad del servicio durante esta fase de obras, Renfe estableció un dispositivo especial con trenes de reserva en las estaciones de Fuenlabrada y Móstoles-El Soto, así como personal de asistencia técnica en todas las paradas del recorrido. Además, se reforzó la atención al cliente en estaciones como Cuatro Vientos, donde la coordinación con Metro de Madrid ha sido fundamental para evitar aglomeraciones y mantener la fluidez en los transbordos.
También se incrementó el número de profesionales en conducción, seguridad y atención al viajero, con el objetivo de absorber el crecimiento de la demanda y ofrecer una respuesta ágil ante cualquier eventualidad.
Esta actuación, orientada a minimizar el impacto en la movilidad de los más de 80.000 vehículos privados y autobuses que circulaban por la zona afectada por las obras de la A-5, ha confirmado el papel estratégico de la red de Cercanías como solución eficaz para absorber la presión sobre el transporte público en contextos de transformación urbana.