El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha afirmado este viernes que no pondrá en cuestión la labor judicial tras la imputación del exministro de Hacienda Cristóbal Montoro, y ha recalcado que su criterio sobre la corrupción "es muy claro y no cambia con independencia de a quién afecte". "Lo que haya que investigar, que se investigue", ha manifestado en un mensaje difundido en la red social X, en el que ha evitado cualquier insinuación de persecución judicial o manipulación mediática.
La declaración del líder del PP se produce tras la imputación de Montoro por parte de un juez de Tarragona, quien investiga si el exministro favoreció a determinadas empresas gasistas desde su puesto al frente del Ministerio de Hacienda. Según el auto judicial, las decisiones legislativas adoptadas durante su mandato habrían beneficiado a compañías vinculadas a un despacho de abogados fundado por el propio Montoro antes de entrar en el Gobierno.
Desde el Ejecutivo socialista y el PSOE se ha cargado duramente contra el PP, acusando a Feijóo de guardar silencio ante un caso que consideran de extrema gravedad. El ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López, llegó a calificar de "prácticas mafiosas" las actuaciones atribuidas al exministro popular, y reprochó a Feijóo la falta de explicaciones públicas, en contraste con la "contundencia" que, según el Gobierno, habría mostrado el PSOE en casos como el del 'caso Koldo'.
Ante estas acusaciones, Feijóo ha reiterado su disposición a que se investigue todo lo que sea necesario, pero sin alimentar discursos victimistas ni atacar a las instituciones. El vicesecretario de Hacienda del PP, Juan Bravo, ha defendido en esta línea que el partido "está dando la cara" y ha recalcado que el líder popular "no se ha escondido nunca", a diferencia —ha dicho— del Presidente del Gobierno. Bravo recordó que Pedro Sánchez llegó a estar más de un mes sin dar explicaciones y evitó comparecer en rueda de prensa tras reuniones oficiales con mandatarios internacionales.
En un comunicado difundido este jueves, el Partido Popular informó de que Cristóbal Montoro había comunicado su baja voluntaria como afiliado tras conocerse su imputación. Paralelamente, el Comité de Derechos y Garantías del partido le abrió un procedimiento informativo, que ha quedado suspendido tras su renuncia.
Fuentes del partido han querido marcar distancias con la gestión de los casos judiciales en el seno del PSOE. "No, no somos iguales", han afirmado desde Génova, en referencia al tiempo que tardó el exministro socialista José Luis Ábalos en abandonar el partido tras su implicación en el 'caso Koldo'. Subrayan que Montoro fue ministro hace más de siete años, que no fue nombrado por la dirección actual ni la anterior, y que ha dejado de ser afiliado "en menos de un día".
Por su parte, el propio Cristóbal Montoro ha defendido su inocencia y asegura que no hay pruebas que justifiquen su imputación. En un comunicado remitido a los medios, ha afirmado que su inclusión como investigado se basa exclusivamente en haber ocupado el cargo de ministro, "sin ningún elemento probatorio". El caso se centra en la supuesta vinculación entre normativas adoptadas durante su mandato y los intereses de antiguos clientes del despacho Equipo Económico (EE), fundado por él antes de incorporarse al Ejecutivo.