El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado una inversión de 8,6 millones de euros destinada a acometer las obras de urbanización del barrio de la Unidad Vecinal de Absorción (UVA) de Hortaleza.
Esta actuación, además, permitirá culminar el proceso de realojo de las familias que aún residen en esta zona del noreste de la capital.
La decisión ha sido tomada por el Consejo de Gobierno, que ha dado luz verde a la contratación del proyecto mediante un procedimiento abierto. Según ha informado el Ejecutivo autonómico, el plazo de ejecución será de 18 meses a partir de la firma del contrato. El inicio de las obras está previsto para octubre.
El proyecto contempla una intervención integral en un área de más de 35.000 metros cuadrados. Las actuaciones incluyen la consolidación del terreno, pavimentación de calles, mejora de zonas ajardinadas y renovación de infraestructuras básicas como el abastecimiento de agua, el saneamiento, el suministro eléctrico y el alumbrado público. Asimismo, se mejorará el sistema de recogida y gestión de residuos.
El área objeto de la remodelación está delimitada por la calle Abizanda al norte, las calles Abárzuza, Virgen del Carmen y Miranda de Arga al sur, Mar de las Antillas y Alfacar al este, y Capitán Cortés al oeste.
Una vez finalizadas las obras de urbanización, la Agencia de Vivienda Social (AVS) dará paso a la construcción de 272 nuevas viviendas destinadas al alquiler social. Estas viviendas se asignarán prioritariamente a las 19 familias que todavía permanecen en la UVA de Hortaleza con derecho a realojo. El resto se reservará para ciudadanos madrileños en situación de vulnerabilidad.
La UVA de Hortaleza fue construida en 1963 como alojamiento provisional para familias procedentes de entornos rurales que emigraban masivamente a las grandes ciudades. Desde entonces, la prioridad de las administraciones públicas ha sido transformar este enclave en un entorno urbano plenamente integrado y con condiciones de vida dignas para sus residentes.
Del total de la inversión prevista, más del 93% será asumido por la Comunidad de Madrid. El resto de la financiación se completará con fondos procedentes del Plan Estatal de Vivienda, en una muestra de colaboración institucional para la regeneración urbana y el apoyo a los colectivos más vulnerables.