El Pleno de Cibeles ha aprobado la modificación de la ordenanza del taxi con los votos del PP y la abstención de todos los grupos de la oposición. La reforma, que sustituye a la de 2012, persigue alcanzar el 5% de vehículos adaptados frente al 2,35% actual. “Es un mandato moral”, defendió el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, quien subrayó que el taxi es clave tanto para la movilidad de la ciudad como para la primera imagen que recibe el turista al llegar a Madrid.
La nueva norma prevé concursos específicos para licencias de eurotaxis, la posibilidad de que sean de clasificación ambiental C para aumentar la oferta de modelos y la autorización para trabajar los siete días de la semana, a diferencia del resto de la flota, que podrá hacerlo solo cinco. Además, se fija un mínimo de 150 servicios al año a personas con movilidad reducida, bajo sanción en caso de incumplimiento.
Carabante destacó también el esfuerzo del gremio para avanzar en la transición energética. El Ayuntamiento ha concedido 13,8 millones de euros en ayudas para renovar 5.000 taxis de los más de 15.000 que circulan en la capital, lo que supone un tercio de la flota. Los vehículos eléctricos puros que ya trabajan siete días podrán mantener esa condición hasta cumplir diez años de antigüedad.
El concejal de VOX Ignacio Ansaldo rechazó la exigencia de la ESO para los conductores, al considerar que es “un muro de entrada” para una generación marcada por el abandono escolar. También cargó contra la imposición de 150 servicios mínimos a personas con movilidad reducida, las sanciones derivadas de esta obligación y el fin del examen de conocimiento de la ciudad, sustituido por el GPS. “Apoye y proteja al taxi, hoy va a hacer lo contrario”, reprochó a Carabante.
Desde el PSOE, Ignacio Benito acusó al PP de aplicar “rodillo” y presentar un texto que “ni de lejos” resuelve los problemas del sector. Criticó la pasividad del gobierno municipal frente a las VTC, que “incumplen a diario” sin sanción, desde circular por carriles bus hasta recoger clientes en la calle. “Han hecho todo para que votemos en contra, pero nos vamos a abstener porque hay alguna mínima mejora respecto de lo que tenemos”, afirmó.
La edil de Más Madrid Esther Gómez recordó que con Manuela Carmena se cumplía con holgura la cuota de eurotaxis, con más de 580 vehículos adaptados y hasta 800 en reserva, mientras que ahora apenas hay 355. Denunció que 125 de ellos están vinculados a plataformas como Uber o Cabify “sin control alguno”. Acusó al PP de liberalizar el sector en 2021 para acercarlo al modelo de las VTC y consideró que la reforma l