El consejero delegado del Atlético de Madrid afirma que la Superliga rompe con la esencia del fútbol y anticipa que no prosperará en los próximos 20 años.
El consejero delegado del Atlético de Madrid, Miguel Ángel Gil Marín, ha reconocido públicamente que cometió “un error” al aceptar la incorporación del club rojiblanco al proyecto de la Superliga en el momento de su creación. Según explicó, esta decisión iba “en contra” de sus principios y, por ello, dos días después optó por salir del proyecto, al considerar que se trataba de un modelo de competición “egoísta y poco solidario”.
“Reconocí el error porque estuve 24 horas dentro de ella porque no me dieron opción y me plantearon firmar. En 48 horas estábamos fuera porque vi que estaba cometiendo un error y que estaba yendo contra mis principios”, declaró durante su intervención en la tercera edición del Business Sport Forum, organizado por los diarios ‘Expansión’ y ‘Marca’.
Gil Marín explicó que aceptó la invitación inicial porque se le ofreció formar parte de la mesa de decisión del futuro del fútbol europeo. “Me dijeron que ibas a tener el privilegio o el derecho, porque te lo has ganado con los resultados de los últimos años”, apuntó, aunque admitió que esa presión venía condicionada por los accionistas del club.
El directivo subrayó que una liga cerrada de 20 clubes acabaría con la globalidad del fútbol y su capacidad formativa en ciudades y países diversos. “Todo se circunscribía a 20 clubes en Europa. Por eso, yo no creo en eso. Hoy en día, aquí en España, por la incidencia y la relevancia que tiene el presidente del Real Madrid, se sigue hablando de ello”, afirmó.
Mostró su convencimiento de que el proyecto no prosperará: “Clubes italianos, alemanes e ingleses no van a formar parte de una posible competición europea nueva. Por consiguiente, yo creo que ni ha nacido ni va a nacer por lo menos en los próximos 20 años”, aseguró.
En relación con la entrada de nuevos inversores, Gil Marín se mostró abierto a ampliar capital con fondos como Apollo Global. “Están abiertos a realizar más ampliaciones de capital, ya que les parece mejor opción que llevar a cabo palancas como hacen otros clubes”, señaló, en referencia al modelo del FC Barcelona.
Recordó que el club llevó a cabo una ampliación de 70 millones de euros en 2024 y otra anterior de 120 millones en 2021. “Es verdad que hay clubes que no son sociedades anónimas y tienen que recurrir a este tipo de palancas”, indicó, remarcando que las ampliaciones son “necesarias para que la parte de club funcione mejor”.
Defendió la inversión en infraestructuras, instalaciones y servicios como base para una nueva concepción del fútbol como industria del entretenimiento. “El fútbol tiene que ser mucho más de 90 minutos”, afirmó, apuntando que en los últimos 20 años el deporte se ha transformado en una verdadera industria, cada vez más orientada al ocio.
“Estamos dando un viraje de lo que es una industria de deporte a una industria de entretenimiento, de ocio y de deporte”, sostuvo, destacando el papel de las nuevas tecnologías y las exigencias de las nuevas generaciones.
Respecto al comienzo de temporada del Atlético, Gil Marín lo calificó como “decepcionante”, aunque reiteró su confianza plena en el técnico Diego Pablo Simeone. “Cinco partidos no nos pueden hacer cambiar. Yo sigo creyendo al 200 por ciento en él porque lo veo, que él no ha bajado nada su ilusión”, afirmó.
Señaló que el club ha invertido cerca de 200 millones de euros en jugadores durante los dos últimos años y resaltó el mérito de haber alcanzado doce temporadas consecutivas en la fase de grupos de la Liga de Campeones.
En relación con el fútbol femenino, expresó su preocupación ante una posible “inflación artificial” impulsada por “políticas feministas”. Aunque defendió la trayectoria del club en esta disciplina, advirtió contra una equiparación salarial forzada. “Le damos la misma relevancia, pero de ahí a querer poner la misma línea de salarios y de relevancia me parece ridículo porque no existe eso”, declaró.