¿Qué ver y hacer en Robledillo de la Jara?

Robledillo de la Jara es un bonito municipio en el Valle de Lozoya, en la Sierra Norte de la Comunidad de Madrid. De forma bastante arcaica, se ubica en el último tramo sur del macizo de Ayllón, entre el río Lozoya y su afluente.
Con una superficie de 20,35 km² y 99 habitantes según el INE de 2016, la densidad de población es de 4,86 hab./km². Por número de habitantes es la décima más pequeña de la Comunidad de Madrid, y por superficie, la treintena.
En su término se encuentra el despoblado de El Villar, que da nombre al embalse homónimo.En 1612, por 12.000 reales, el cabildo de Robledillo compró al vecino de Buitrago Juan de Orozco las posesiones que éste tenía en el término de El Villar, ya despobladas, que limitaban con herencia de habitantes de Robledillo, por lo que de entonces todo el territorio de El Villar estaba en manos del Ayuntamiento y vecinos de esta ciudad.
Para el pago de la compra, el Ayuntamiento vendió 1.500 pies de encinas de la Dehesa de Casasola y un molino que poseía en el término de El Atazar. En 1847 se produce la anexión del municipio de Robledillo al de El Atazar, que duró o se mantuvo hasta 1928.
Y en 1977 hubo que fusionar Robledillo, La Puebla y Berzosa en una sola entidad municipal, con denominación de Valle y Capital en el núcleo de población de Robledillo de la Jara, tal y como establece el Real Decreto del Ministerio del Interior por el que se aprobó el proyecto.
Los 3 lugares que no te debes perder en una escapada a Robledillo de la Jara
1- Taberna-Museo Etnográfico
Situada en la antigua plazoleta, hoy Calle de la Soledad nº 12, se trata de una casa del siglo XIX que alberga viviendas recuperadas a finales del XX para el Museo Etnográfico y un pequeño bar, sin cambiar la estructura rústica original. Incluso las puertas de entrada al corral o patio son las originales de la casa perfectamente conservada, y los suelos, con losas de piedra de la zona, los tradicionales de la vivienda de Robledillo.
2- Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol
Construida en 1893 sobre las ruinas de otro anterior, presenta cierto aire neomudéjar popular. Tiene una sola nave, cubierta con disco de medio punto, con alojamiento para dos campanas, estructura de madera con tejas y cubierta de teja árabe.
3- Museo de Formas de Vida del Pasado
Tradicionalmente, en cada ciudad había una Tejera, que solía estar situada en las afueras de la población, en un lugar arcilloso, de fácil acceso, y cercano a un arroyo donde tener a mano todos los ingredientes de las tejas. Cada número de años se fabricaban los necesarios, siempre teja árabe. Por ejemplo, y según consta en el Archivo Municipal de Robledillo, en 1879 se prepararon en su Tejera 24.559 tejas, que pidieron y usaron los propios vecinos.