Toda la circulación se desviará de la calzada norte a la sur (sentido entrada a Madrid) desde las 6 horas de este lunes al adelantarse un mes la excavación del túnel de la A-5, ha informado la portavoz municipal, Inma Sanz, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
"Adelantamos un mes la fecha prevista para la excavación del túnel que soterrará la A-5 en la calzada norte en sentido salida a Madrid", ha detallado la también vicealcaldesa. Será desde este lunes cuando "se va a desviar todo el tráfico de la A-5 a la calzada sur en sentido entrada para avanzar en la excavación del túnel que soterrará la autovía en el tramo norte recortando un mes de plazo respecto a las fechas que estaban previstas".
Se finaliza así esta primera fase de desvíos ocasionados por la construcción del túnel que desde febrero había discurrido por esa calzada norte. Ahora se da paso a la segunda fase de desvío del tráfico rodado en el sentido entrada a la capital desde la Avenida de Portugal hasta la avenida de Padre Piquer en cuatro carriles, dos para cada sentido, despejándose por completo la calzada norte. Los pilotes y losas del túnel sur están prácticamente ejecutados, ha concretado.
Se simplificará así el trazado a la circulación con menos curvas, aunque se mantendrán los bypasses de los enlaces de la carretera de Boadilla, Yébenes, Batán y Parque de Atracciones, que requieren de desvíos de más larga duración para demoler las estructuras preexistentes.
Este trazado se mantendrá hasta noviembre de 2026, momento en que se abrirá el túnel para el tráfico rodado. La velocidad máxima de la vía en la zona de actuación se mantiene reducida de los 70 km/h previos a la obra a los 50 km/h.
Por la A-5 circulaban diariamente 80.000 vehículos. La obra, una vez finalizada, reducirá en un 90 % los vehículos en superficie y las emisiones contaminantes. En superficie, la cubrición de la A-5 permitirá dar continuidad al bulevar peatonalizado de la avenida de Portugal hasta la avenida del Padre Piquer en una actuación que comprende un total de 3,2 kilómetros. Se priorizará la movilidad peatonal y ciclista, dejando una vialidad dimensionada para atender los recorridos locales del vehículo privado y el transporte público urbano.
Bajo tierra, el nuevo túnel tendrá una distribución de tres carriles por sentido en dos vanos. Los carriles más próximos a la mediana en ambas calzadas se diseñan para su uso como carriles bus-VAO, dotados con una señalización variable que permitirá regular su utilización en función de las necesidades del tráfico en cada momento. La flexibilidad de este sistema permitirá la optimización de la infraestructura, adaptándose a la demanda de transporte de manera variable, ha recordado el Ayuntamiento en un comunicado.