La Corporación municipal y muchos vecinos de Torrejón se suman al minuto de silencio por los guardias civiles asesinados

El alcalde de Torrejón de Ardoz, Alejandro Navarro Prieto, el resto de la Corporación municipal, miembros de la Policía Local y numerosos vecinos que han querido mostrado esta mañana a las puertas del Consistorio su repulsa por el asesinato en Barbate el viernes de dos guardias civiles.
De este modo, Torrejón de Ardoz se suma al minuto de silencio que la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha convocado con motivo del cruel asesinato de dos guardias civiles en acto de servicio contra el narcotráfico en Barbate, ha informado el Ayuntamiento en una nota de prensa.
El Consistorio había invitado a todos los vecinos que han querido unirse a un minuto de silencio en memoria de los dos agentes caídos, como "muestra de apoyo y solidaridad con las víctimas y sus familiares y en reconocimiento a la gran labor realizada por los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado".
En el emotivo acto, el primer edil torrejonero ha transmitido sus condolencias y un mensaje de cariño y apoyo a las familias y a todos sus compañeros de la Guardia Civil.
"En estos difíciles momentos queremos mostrar nuestro unánime rechazo contra la violencia y el narcotráfico, uniéndonos al duelo de la localidad de Barbate y de toda España en este acto simbólico que no sólo quiere honrar a los fallecidos, sino reconocer también la valentía y dedicación de todos aquellos que luchan por proteger nuestra sociedad. Porque sin seguridad no hay libertad", ha añadido.
Numerosos torrejoneros han podido honrar la memoria de David Pérez y Miguel Ángel González, quienes "dieron su vida por la seguridad de todos los españoles mientras luchaban contra el narcotráfico a la par que reconocen el trabajo de las fuerzas del orden nacionales".
La patrullera del GEAS de la Guardia Civil, ocupada por seis agentes, fue embestida en la noche del viernes al sábado, cuando se acercaba a una de las narcolanchas. Como consecuencia de este hecho, murieron los dos agentes y otros dos resultaron heridos, uno de gravedad y otro leve.
Uno de los fallecidos, Miguel Ángel, de 39 años y natural de San Fernando (Cádiz), con pareja y una hija, pertenecía a un equipo del Grupo de Especialistas de Actividades Subacuáticas (GEAS). El otro guardia civil que perdió la vida, David, era agente del Grupo de Acción Rápida (GAR). Nacido en Barcelona, tenía 43 años, estaba casado con una mujer y tenía dos hijos.