El Códice Calixtino, un tesoro nacional

El Códice Calixtino es un manuscrito del siglo XII compuesto por cinco libros y dos apéndices que se encuadernó en un único tomo en 1964. El libro nació para propagar la devoción por el apóstol Santiago, convirtiéndose en una especie de guía para los peregrinos que se dirigían a la metrópoli ya que incluye consejos, posibles alojamientos, descripciones de la ruta, también de las obras de arte así como de las costumbres locales de las gentes que vivían a lo largo del camino.
Además, la obra incluye ricas ilustraciones y 22 piezas polifónicas contadas entre las más antiguas de Europa. Mide 30 cm de largo y 21 cm de ancho y se compone de 225 folios de pergamino.
La importancia del manuscrito ha sido recalcada por varios expertos. El catedrático de Música de la Universidad de Santiago, Carlos Villanueva, estudioso del Códice, apunta que "se trata de una obra única, quizás una de las mejores copias, si no el original, del Liber Sancti Iacobi", cuyo hurto constituye "un golpe tremendo, porque es una pieza significativa y fundamental para el conocimiento de la historia".
El decano de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidade de Santiago, Juan Monterroso, reseña el Códice como "un documento único en el fondo de manuscritos de la era medieval" y "uno de los pocos ejemplares a nivel mundial", también añadió que hay en el mundo "tres copias incompletas" y "diferentes" al de Santiago.
El valor del manuscrito ha sido calificado como "incalculable" al tratarse de la primera guía del Camino de Santiago.
El Codex Calixtinus desapareció de la Catedral de Santiago de Compostela el 5 de julio de 2011, en lo que se ha considerado la posibilidad de que sea uno de los hurtos más importantes de patrimonio histórico y artístico de España. La ausencia del códice, guardado en una caja fuerte del archivo, se descubrió una semana más tarde y se temió que la pieza no estuviera asegurada.
La mayor preocupación del deán, José María Díaz, fue la conservación de la obra. Modificaciones en las condiciones de luz y humedad y una manipulación inapropiada puede producir una alteración de los colores y el desprendimiento de sus páginas.
Por fin, el pasado 8 de julio el manuscrito ha sido devuelto por el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al arzobispo de Santiago, Julián Barrio, en una ceremonia donde han asistido diversas autoridades, como el titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y numerosos miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como el juez instructor, José Antonio Vázquez Taín.
El autor del hurto era el antiguo electricista de la catedral, Manuel Fernández Castiñeiras, que confesó el delito. El acusado señaló que se trataba de una venganza hacia los eclesiásticos por su despido y por no haberle abonado los 40.000 euros que pedía como indemnización. Además, la policía ha descubierto 1,2 millones de euros en efectivo que según la investigación llevada a cabo, proceden del robo continuado del cepillo y de la caja fuerte.