La consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, ha defendido este viernes la decisión de los consejeros autonómicos del Partido Popular y del País Vasco de abandonar la reunión extraordinaria del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), celebrada en Zaragoza. Según ha denunciado, el Ministerio de Sanidad, dirigido por Mónica García, "utiliza la institución con fines partidistas, para hacer política sectaria y oposición, sobre todo al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso".
La reunión había sido convocada para abordar la financiación y distribución de fondos europeos para centros integrales de cáncer y el desarrollo del sistema de vigilancia oncológica, en medio de la polémica generada por la negativa de varios gobiernos autonómicos del PP a remitir datos sobre sus programas de cribado, tras conocerse fallos en el sistema andaluz.
Matute ha denunciado un "uso ideológico del Consejo", acusando a la ministra de Sanidad de "eludir su trabajo" y de ocultar su "ineficiencia" mediante "salidas de tono" que sólo buscan confrontación. “No quiere gobernar, quiere hacer oposición, y en especial, oposición a Madrid”, ha afirmado.
La consejera madrileña ha asegurado que la polémica sobre los cribados de cáncer "ha sido la gota que ha colmado el vaso", y ha alertado sobre el riesgo de transmitir a la población una imagen distorsionada de estos programas. “Tenemos cribados sólidos, excelentes, que se miden a diario”, ha subrayado.
En su intervención, Matute ha acusado al Ministerio de reclamar datos "sin haber hecho su trabajo previo", al no definir los indicadores comunes ni contar con un sistema informático compartido para el volcado de información. “Está acostumbrada a trabajar a palotes y que luego venga Tezanos a interpretar los resultados”, ha ironizado, en alusión al presidente del CIS.
También ha cargado contra el Gobierno de Pedro Sánchez por “no tener interés real en la Sanidad”, acusándolo de haber recortado en un 50% el presupuesto sanitario en 2024 y de prorrogar unas cuentas que reducen esta partida de 3 a 1 millón de euros. “Ha quitado uno de cada dos euros y además ha dejado sin ejecutar 365 millones que podían haberse destinado a la ELA”, ha denunciado.
Matute ha respondido así a las críticas del Ministerio, que acusó a varias comunidades del PP de no saber “aprovechar los fondos” y de obstaculizar la estrategia nacional en materia de salud pública. La consejera ha defendido la labor de las regiones con las competencias transferidas: “Nos dejamos la piel trabajando para mejorar la salud”, ha concluido.