Entrevista a Cristian Toro, campeón olímpico

El palista español fue campeón Olímpico en Rio 2016 formando pareja con Saúl Craviotto en la prueba del K2 500. Toro, nació en Venezuela, pero que poco tiempo después se trasladó a España para instalarse junto con su familia materna en la provincia de Lugo, concretamente en Viveiro.

Comenzó la práctica del piragüismo precisamente en esa población. El punto álgido de la carrera deportiva de Cristian Toro llegó en los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro 2016, cuando logró sumar el oro olímpico, junto con Saúl Craviotto, en la prueba del K2 200 metros.

Un sinfín de premios acompañan la trayectoria de uno de los mejores deportistas de nuestra historia, pero el pasado día 23 de enero dijo adiós al Deporte en activo y eso duele mucho. Después de esta decisión muy sopesada tuvimos el placer de charlar con él. 

Christian, no sé si darte la enhorabuena por toda tu trayectoria o consolarte, porque me imagino que para una persona que se ha dedicado toda su vida al deporte tiene que ser muy difícil pasar estos momentos

Sí, aunque un deportista siempre tiene presente que es un momento que tiene que llegar. 

¿Qué le dirías al niño que empezó a remar hace dos décadas?

Le diría que merece la pena todo el esfuerzo que hará y, sobre todo, lo más importante, que conseguirá todos sus objetivos. Como bien dices, me retiro con la conciencia muy tranquila y agradecido por todo lo que el deporte me ha organizado.

Hablando de ese niño que arrancó en el mundo del deporte, ¿qué recuerdas de él?

Recuerdo (para unos segundos porque se emociona). Recuerdo que estaba cargado de ilusiones, que no tenía miedo a nada. Creo que esa ha sido una de las claves para  que haya podido estar en lo más alto, porque siempre ha confiado en que lo podía conseguir y ha tenido la suerte de tener gente al lado que me le ha ayudado a conseguirlo. 

¿Cuándo te das cuenta de que te vas a dedicar a esta profesión?

No hay ningún Tal vez con 14 o 15 años, cuando digo dije que iba a apostar por esto, pero fue una apuesta un poco a ciegas porque no sabes si vas a conseguir el objetivo. Entonces, te diría que mi apuesta fue sobre los 16 años.

Parece que últimamente está mal visto eso de catalogarse como uno de los mejores

Sí, bueno, siempre tendemos a criticar a la gente que tiene confianza en sí misma y creo que eso fundamental para todo, no solo para el deporte. En la vida debemos tener confianza, siempre desde una actitud humilde y con respecto a los demás. Pero sí que es verdad que fue un momento clave en mi carrera.

Llegó un punto en el que me di cuenta de que estaba compitiendo con mis ídolos y que tenía que pensar en ganarles, de ello dependía mi trabajo y de ello dependían mis resultados.

¿Cuál fue tu mejor y tu peor momento como deportista?  

El peor fue en 2019, cuando tuve que dejar el equipo a escasos meses del Mundial por una depresión provocada por circunstancias personales. Existían otras situaciones para estar feliz, acababa de nacer mi hijo, me acababa de comprar una casa con mi mujer, tenía muchas situaciones positivas, pero también tenía muchas negativas a mi alrededor. No culpo a nadie de esta situación, sino la forma en la que yo actué, no expresé estos sentimientos a nadie de mi entorno, nadie supo ver lo que me estaba pasando.

Todo este proceso me llevó a un momento en el que te das cuenta de que empiezas a estar mal. Solo te das cuenta cuando estás realmente mal. Para mí, ese año fue un año muy duro porque marcó mi carrera deportiva. Es una situación que me alegra haber pasado porque me ha servido de aprendizaje para el resto de mi vida.

Me parece muy valiente y necesario tu relato. Hablar con esta normalidad de la salud mental hace no mucho era un tabú

En el momento en el que me pasó a mí, te tengo que decir que no recibí prácticamente apoyo. Muy pocas personas me apoyaron y la gran mayoría me criticaron, me juzgaron y no entendían lo que me pasaba. Por un lado, no los culpo, porque yo tampoco lo entendía. Solo sabía que me despertaba triste, me acostaba triste y no hallaba un porqué para pasar un día. Un día para mí era una odisea. El que está en esa situación es incapaz de detectarlo. 

Muchas veces, nuestro mejor amigo lo está pasando mal y quedamos a tomar unas cañas con él, le preguntamos qué tal y te dice bien, cuando realmente no está bien y no sabemos detectar que no está bien y es una persona que conocemos de toda la vida. 

Háblame de los JJ.OO. de 2016. ¿Qué recuerdas de ese momento?

Ahí estaba, en el sitio donde había soñado estar, con mi ídolo y ganando. No hay mejor situación para un chaval que esa situación. Lo recordaré  el resto de mi vida, pero lo que más me llevo de ese momento es el trabajo en equipo, saber aprovechar los ejemplos que tienes a tu alrededor. 

¿Ahora qué? Se acaba una vida y empieza otra nueva 

Pues sí, yo ahora mismo valoro varias posibilidades, pero todas ellas pasan por seguir vinculadas al deporte. 

¿Si le tuvieras que dar un consejo a tu hijo si quisiese dedicarse al deporte qué le dirías?

Bueno, que disfrute, que se deje ayudar y que, sobre todo, lo más importante, que sea persona.