La Policía Municipal de Madrid ha desalojado este fin de semana a 178 personas, 73 de ellas menores de edad, que participaban en dos fiestas ilegales que se celebraban en un locutorio del distrito de Puente de Vallecas y en una nave industrial del distrito de Fuencarral.
Según ha informado el Ayuntamiento de Madrid en una nota, la primera intervención tuvo lugar en la tarde del pasado sábado en un locutorio de la calle del Párroco Don Emilio Franco, en Puente de Vallecas, en cuya puerta aguardaba medio centenar de jóvenes para acceder a la fiesta.
Cuando los policías entraron al local, en el que también se vendían productos de alimentación, comprobaron que al final de un pasillo muy estrecho había un estancia de unos 40 metros cuadrados en penumbra, con luces de colores intermitentes y con música a gran volumen.
En este espacio localizaron a 110 personas, de las que 73 eran menores de edad, así como numerosas botellas de cerveza de litro y de alcohol de diferentes marcas dispuestas para su consumo.
El encargado del locutorio, E.R.F., de 53 años y nacionalidad boliviana, reconoció que había alquilado la habitación por cien euros a dos menores para celebrar una fiesta de cumpleaños a cambio de dos euros la entrada.
El hombre fue denunciado por irregularidades en la documentación administrativa y por falta de medidas de seguridad en el local.
Los menores, por su parte, fueron desalojados cuando los agentes comprobaron que no habían consumido alcohol y que se encontraban en perfecto estado.
Horas después, durante la madrugada, los agentes del distrito de Fuencarral recibieron otro aviso que les alertaba de una gran afluencia de personas en una nave industrial situada en la calle de María de Tubau.
Cuando los agentes llegaron al lugar comprobaron que en el interior de la nave se estaban celebrando dos fiestas, con música a gran volumen y donde se expedía todo tipo de bebidas alcohólicas.
Cada uno de los 68 asistentes a las fiestas habían pagado una entrada de tres euros.
Tras constatar la inexistencia de cualquier tipo de licencia, documentación o seguro, los policías levantaron el correspondiente acta por infracción de la normativa.
Además, se instruyeron diligencias judiciales en la comisaría del distrito por las lesiones que sufrió una mujer de 19 años que había caído en el interior de la nave desde una altura de tres metros por unas escaleras que se encontraban en obras.
La joven fue trasladada al Hospital Gregorio Marañón tras ser atendida en el lugar por los servicios sanitarios del Samur-Protección Civil.
El Ayuntamiento de Madrid ha informado de que el arrendatario de la nave, J.C.G, de 38 años, es un conocido de la policía por organizar este tipo de fiestas, cambiando periódicamente la ubicación de las mismas, a pesar de haber sido denunciado en numerosas ocasiones.