¿Qué ver y hacer en Gascones?
Gascones es un municipio de la comunidad y provincia de Madrid. Tiene una superficie de 20,04 km² con una población de 145 habitantes y una densidad de 7,24 hab/km². En 1968 se abrió al tráfico la línea Madrid-Burgos, conectando la zona con el resto de la red ferroviaria española.
El ayuntamiento tenía su propia estación de tren, con un edificio de pasajeros y un almacén portuario para mercancías, aunque las instalaciones finalmente se deterioraron y se cerraron para su uso en la década de 1990.
La iglesia, del siglo XVII, es el elemento datado más antiguo. La principal producción del núcleo era la ganadería, complementada con la agricultura de subsistencia. El ganado era principalmente ovino: también había cabras, yeguas, vacas, mulos, burros, y cerdas.
Durante la Guerra Civil Española, Gascones quedó prácticamente destruido; Aquí tuvo lugar la famosa Batalla de Gascones. A partir de los años 90, el municipio se desarrolla para el turismo y, gracias a las casas rurales de Gascones, ofrece la oportunidad de disfrutar del turismo rural en un bello entorno natural.
La industria de Gascones se ha reducido a la derivada de la producción agrícola y ganadera, donde se pueden mencionar los hornos de pan y las conservas de carne. El comercio también es escaso y se limita a la exportación de algunos cereales y una buena cantidad de carne, leche y lana, ya la importación de alimentos, licores, textiles y los productos necesarios para la población.
En 1921, Juan Ortega Rubio, en su 'Historia de Madrid y de las ciudades de su provincia' habla de Gascones como una ciudad de 236 habitantes , en la que destaca la Iglesia de Santo Tomás Apóstol, la Virgen del Rosario y la Virgen del Carmen, alabando la imagen de esta última.
Dice de su Casa-Ayuntamiento, que es modesta, aunque no tanto como la escuela primaria para ambos sexos. Sobre la agricultura cita la producción de centeno, otros cereales, frutas, legumbres y hortalizas, y sobre la ganadería, como está compuesta por bovinos y ovinos.
Asimismo, menciona la producción de heno de las dehesas y encinas del monte Dehesilla. Para 1930, la población había vuelto a aumentar hasta los 302 habitantes de hecho y los 247 de derecho, aumento que rompería la Guerra Civil española de 1936 a 1939, cuando la población descendió a 11 y 145, respectivamente, registrados en 1940.
Este conflicto bélico colocó a los gascones en el centro de la línea de frente, provocando la destrucción del núcleo urbano hasta tal punto que sólo quedó en pie una parte de la iglesia y un pajar tras la finalización del conflicto.
Aunque la organización 'Regiones Devastadas' reconstruyó la iglesia en las décadas de 1940 y 1950 y dotó a la ciudad de nuevos edificios municipales, un grupo escolar mixto, vivienda para el maestro y una fuente, fueron los propios vecinos quienes tuvieron que reconstruir sus casas y otros edificios destruidos.
