La ruptura de Ganar Alcorcón con Raquel Rodríguez deja al Gobierno municipal en minoría
El Ayuntamiento de Alcorcón ha entrado en una nueva etapa de inestabilidad institucional tras el cese de la concejal de Cultura, Festejos y Mayores, Raquel Rodríguez, que pasa a formar parte del grupo de No Adscritos. Esta decisión, adoptada por el grupo municipal Ganar Alcorcón, deja al Gobierno local en situación de minoría y obliga a una reorganización interna para garantizar la continuidad del proyecto.
La medida se produce tras semanas de tensiones entre la edil y su formación, que culminaron con su salida oficial del grupo. El Gobierno municipal, compuesto por PSOE, Ganar Alcorcón y Más Madrid, contaba con 14 concejales frente a los 15 de la oposición. Con esta salida, la coalición pierde el apoyo necesario para sostener la mayoría en el pleno.
Desde Ganar Alcorcón justifican el cese de Rodríguez por “la deriva” que, según denuncian, ha tomado en las últimas semanas. Le reprochan su “deslealtad” con el proyecto político y haber roto la unidad interna del grupo. El nuevo portavoz y líder de la formación, David López, ha criticado su comportamiento calificándolo de “tránsfuga”, acusándola de pactar con PP y VOX para boicotear las decisiones del Ejecutivo municipal.
La propia Rodríguez, en un comunicado difundido simultáneamente, ha anunciado su paso a concejala no adscrita, denunciando haber sido víctima de una “campaña de acoso y derribo”. Ha defendido su actuación como fiel al espíritu fundacional de Ganar Alcorcón y ha reafirmado su voluntad de continuar trabajando por la ciudad desde su nuevo rol.
“Lo vivido en los últimos meses me obliga a tomar esta dura decisión, pero no pienso dejar a medias lo que empezamos. Quedan dos años para seguir construyendo comunidad”, ha manifestado.
Desde el Ayuntamiento, fuentes del Gobierno han confirmado que se ha procedido a retirar a Rodríguez sus responsabilidades institucionales conforme a la normativa vigente, pasando a ser clasificada como edil no adscrita. De forma transitoria, sus competencias serán asumidas por otros miembros del Ejecutivo en base al régimen de delegaciones fijado al inicio del mandato.
El Gobierno local reconoce la dificultad de la situación, pero asegura que seguirá trabajando “desde el rigor y la responsabilidad” para superar esta etapa. Han avanzado una reestructuración de los equipos con el objetivo de mantener el cumplimiento de los compromisos adquiridos y seguir ejecutando el programa común.
Insisten, además, en que la acción del Gobierno se mantendrá basada en “el consenso y el acuerdo”, reivindicando el trabajo conjunto frente a los intereses personales o partidistas.
La fractura se hizo evidente a finales de mayo, cuando Rodríguez fue acusada de aliarse con la oposición en una moción que evidenció la falta de cohesión interna del Ejecutivo. No obstante, la exconcejal defendió entonces que la moción salió adelante por el error de votación de una compañera de Gobierno, Trinidad Castillo, de Más Madrid, quien se equivocó levantando la mano durante la votación.
En respuesta a la crisis, Rodríguez ha anunciado la convocatoria de una asamblea abierta el próximo 22 de junio en el centro cultural Margarita Burón, con el fin de “recuperar el espíritu de Ganar Alcorcón” y escuchar las necesidades reales de los vecinos. “No nos van a amordazar. Tenemos voz y vamos a usarla”, ha afirmado.
