La prevalencia de obesidad en la población de 12 años en la región roza el 12%

La prevalencia de obesidad en la población de 12 años en la región roza el 12%

La prevalencia de obesidad en la población de 12 años de la Comunidad de Madrid es de 11,7%, siendo mayor entre los varones de esa edad, donde llega al 15,3%, que entre las mujeres, con un riesgo de padecer este problema de salud pública de 2,02 puntos mayor entre los primeros que entre las segundas, según se desprende de los resultados del Estudio Longitudinal de Obesidad Infantil (ELOIN).

Esta sábado se conmemora el Día Mundial de la Obesidad, un grave problema de salud pública a nivel mundial, cuya magnitud y transcendencia ha aumentado en las últimas décadas y en cuya causa influyen factores como una deficiente alimentación, la falta de descanso, hábitos sedentarios o aspectos económicos y que, a su vez, repercute en problemas psicológicos.

A nivel nacional, según los últimos datos oficiales disponibles, correspondientes a 2019, la prevalencia de la obesidad infantil se sitúa en el 19,3%, mientras que en las niñas baja al 15%.

En el caso de la Comunidad de Madrid, la mayoría de los niños de 12 años tienen ingestas excesivas de carnes rojas, precocinados y aperitivos dulces y salados y deficientes de cereales y derivados, carnes de aves y frutas, practican al menos dos horas semanales de actividad física durante el horario escolar, aunque el 34,9% dedica menos de una hora a la semana a actividad física durante el horario extraescolar, sobrepasa el tiempo de uso recomendado de uso de pantallas (TV, ordenadores y videoconsolas) e incumple la recomendación de dormir al menos 9 horas diarias.

El último Estudio Longitudinal de Obesidad Infantil (ELOIN) sobre los factores de riesgo de sobrepeso y obesidad infantil realiza un seguimiento a un grupo de niños de los 4 a los 12 años en base a exploración física y encuesta telefónica que incluye una muestra de 2.130 niños de 12 años con datos recogidos entre febrero de 2020 y mayo de 2022.

Según las conclusiones del mismo, es necesario seguir incidiendo en las recomendaciones dirigidas al control de los factores de riesgo del sobrepeso y la obesidad infantil, en especial en aquella población con menor capacidad adquisitiva y mayor riesgo de vulnerabilidad.

En detalle, entre los 4 y los 12 años de edad se observó una evolución favorable en el aumento de la práctica de actividad física extraescolar, del consumo de verduras y de las bebidas azucaradas, pero, por el contrario, se comprobó un incremento importante del uso de pantallas, especialmente durante los fines de semana y una reducción de las horas diarias de sueño y un consumo excesivo de productos cárnicos y de bollería.

En la población de 12 años, la prevalencia de obesidad fue mayor en niños (15,3%) que en niñas (8,2%), y en aquellos con menor nivel socioeconómico (19,3%). Además, la obesidad infantil es mayor en aquellos niños de familias con bajo nivel educativo y de origen latinoamericano, así como cuando sus progenitores presentaban obesidad (siete veces mayor que en el caso de padres que no la presentan).

HÁBITOS SALUDABLES

En cuanto a la dieta, se concluye que presenta algunos desequilibrios que sería necesario mejorar mediante un aumento del consumo de frutas, verduras y legumbres, y una reducción de consumo de carne y de alimentos procesados, dulces y refrescos azucarados. Aunque la mayoría presenta una ingesta adecuada, en torno al 51,3% de los niños y el 46,5% de las niñas tenían una ingesta diaria superior a la recomendada.

Respecto a los alimentos, se observaron ingestas adecuadas de lácteos, pescados, legumbres, verduras y hortalizas, ingesta insuficiente de cereales y frutas y en exceso de carnes rojas y de aves, refrescos y aperitivos salados y dulces. Destaca, además, que el 59,1% de los niños acudía a establecimientos de comida rápida de 1 a 3 veces al mes y un 2,3% no desayuna nunca.

En cuanto a la actividad física, los niños practican bastante actividad física pero un porcentaje considerable no realiza ninguna actividad física extraescolar. En concreto, aunque la mayoría (95,4%) practicaba al menos dos horas a la semana de gimnasia en el horario escolar, un 39% dedicaba menos de dos horas a la semana a actividad extraescolar (31,6% en niños y 46% en niñas).

Además, los niños usan de forma mayoritaria las pantallas de manera excesiva, en especial, durante los fines de semana. En concreto, la mayoría (85,3%) solía hacer uso de pantallas al menos una hora al día: entre semana, el 32,7% de la población dedicó tres o más horas al día al uso de pantallas, aumentando este porcentaje al 86,1% en los fines de semana.

En cuanto al juego al aire libre, el 45,9% de la población de 12 años no solía salir a jugar al aire libre. El 27,6% salía a jugar a diario de lunes a viernes dos horas o más, siendo superior en niñas que en niños. Durante el fin de semana, el 38,9% salía a jugar al aire libre entre una y dos horas diarias, y el 54,8% declaró salir a jugar tres horas diarias o más.

Respecto a las horas de descanso, la población infantil de 12 años duerme una media de 8,7 horas de lunes a viernes y 9,8 horas los fines de semana. De esta forma, un porcentaje alto de la población infantil (41,2%) no cumplía la recomendación de dormir entre semana 9 o más horas diarias, bajando al 11,6% cuando se trataba de los fines de semana.

Además, los datos sugieren que los niños en obesidad presentan peor salud mental que los que están en normopeso. En detalle, según el estudio, la prevalencia de mala salud mental fue de 15,4% en aquellos niños en normopeso, alcanzando el 18,4% y 21,9% en los niños en sobrepeso y obesidad, respectivamente.

BRECHA ECONÓMICA Y GENÉTICA

El informe concluye además que la población de bajo nivel socioeconómico suele tener peores hábitos alimentarios, sueño, actividad física y uso de pantallas, que la de alto nivel socioeconómico, y sugieren, además, que presentan peor salud mental que los que están en normopeso.

En esta caso, aquellos niños pertenecientes a familias de nivel socioeconómico bajo presentaban una prevalencia de obesidad de 19,6%, frente al 8,9% de los de familias de nivel socioeconómico alto.

En relación a la genética, la prevalencia de obesidad entre los niños con madre con obesidad fue del 25,8%, frente al 7,2% con madre en normopeso, y del 21,9% en el caso de los niños con padre con obesidad, frente al 8,7% de los niños con padre en normopeso.

Respecto al impacto en la salud mental, el informe concluye que aumenta según lo hace el Índice de Masa Corporal (IMC), con una media de 9,33 en el caso de aquellos niños con obesidad y de 7,99 en normopeso. La prevalencia de mala salud mental era de 15,4% en aquellos niños en normopeso y de 18,4% en aquellos niños en sobrepeso (17,1% en niños y 19,9% en niñas) y de 21,9% en obesidad (similar en niños que en niñas).

Finalmente, en el estudio también se observa que entre los 4 y 12 años se produce una reducción importante del cumplimiento de las recomendaciones del uso de pantallas durante el fin de semana (de 5% de cumplimiento a 49,4%) y entre semana (de 75,7% a 45,5%); reducción del consumo de lácteos y derivados; y reducción de cumplimiento de las recomendaciones de sueño: el 86,4% cumplía la recomendación de dormir 10 horas diarias a los 4 años, frente al 59,6% que dormía 9 horas diarias o más a los 12 años.

 

Publish the Menu module to "offcanvas" position. Here you can publish other modules as well.
Learn More.