El Centro Dramático Nacional presenta en Madrid la obra ‘ZUM. Crecerá un jardín’, una propuesta ambiental creada junto a niños de colegios públicos y del propio teatro.
El Centro Dramático Nacional ha producido ‘ZUM. Crecerá un jardín’, una historia sobre el medioambiente con un enfoque humorístico realizada por Los Bárbaros y los Nuevos Dramáticos, que podrá verse en Madrid entre el 27 de noviembre y el 19 de diciembre. La obra sitúa a un grupo de niños de entre ocho y diez años que se transforman en abejas para recorrer la naturaleza y descubrir personajes del mundo animal.
Durante ese recorrido, los protagonistas se encuentran con una oficina de información atendida por adultos, a quienes cuestionan por su falta de conciencia y de ética ambiental. A través de estas escenas, la pieza plantea una crítica directa hacia quienes, según los niños, están deteriorando el planeta.
La escenografía diseñada por Zuloark propone un espacio dinámico y lúdico que favorece la creatividad. El vestuario de Rocío Bello se ha elaborado a partir de dibujos creados por los Nuevos Dramáticos, mientras que la música original de Pilar Calvo incorpora voces y sonidos grabados con los propios niños.
‘ZUM. Crecerá un jardín’ surge del proyecto Nuevos Dramáticos, en el que han participado 23 niños, tanto hijos de trabajadores del Centro Dramático Nacional como de colegios públicos cercanos. Según el CDN, el objetivo es desarrollar una obra de teatro creada de forma colectiva entre profesionales y menores.
Los Bárbaros —equipo formado por Rocío Bello, Javier Hernando y Miguel Rojo— han asumido la dirección y el texto de esta producción. En la presentación, la coordinadora pedagógica Lucía Miranda señaló que, aunque el proceso se repite cada año, cada edición ofrece resultados distintos al atender a las inquietudes infantiles.
El proceso comenzó en enero, momento en el que Los Bárbaros decidieron ceder protagonismo a la mirada de los niños mediante talleres de improvisación, escritura, escenografía, iluminación, sonido y vestuario. Los menores aportaron sus preguntas, preocupaciones y alegrías durante la creación.
Entre las ideas compartidas por los participantes figuran la necesidad de recuperar plazas, pasar más tiempo con amigas y promover la presencia de flores. Los directores destacaron que estas propuestas invitan a “mirar las cosas bailando”, en referencia al movimiento de las abejas, y a cuidar lo que rodea a las personas por formar parte de ello.
La obra plantea así una reflexión desde la espontaneidad infantil sobre la relación entre el ser humano y su entorno natural. El CDN mantiene este proyecto como una vía para fomentar la creatividad y el compromiso ambiental en la infancia, en línea con otras iniciativas recientes del centro recogidas por MadridActual.es.
La producción estará disponible en la cartelera del CDN durante su periodo previsto de exhibición, con acceso abierto al público familiar interesado en propuestas escénicas contemporáneas.