Pasan a disposición del juez de guardia los detenidos por el crimen de Borja Villacís
Una mujer de 52 años ha sido detenida por su implicación en el asesinato a tiros de Borja Villacís y se encuentra en los Juzgados de Plaza de Castilla, Madrid, para pasar a disposición del juez de guardia.
Otros dos detenidos se encuentran en los calabozos de los juzgados de Illescas, Toledo, esperando declarar ante otro juez tras ser arrestados el miércoles en Juncos (Toledo). Es probable que ambos jueces se inhiban a favor del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, encargado del caso.
María José E.J., la mujer detenida, fue localizada en un lavadero de coches en la Plaza Elíptica de Madrid, donde fue grabada cambiando las placas de matrícula del vehículo usado en el crimen. La Policía ha confirmado que conducía el BMW involucrado en el asesinato, que presentaba abolladuras y airbags desplegados. María José fue vista con dos jóvenes, a quienes acercó en coche hasta la escena del crimen.
Uno de los jóvenes es su hijo, Kevin P.E., de 24 años, quien presuntamente disparó a Borja Villacís y a su amigo Luis F.A., de 27 años. Luis se recupera en el hospital Fundación Jiménez Díaz de las heridas de bala en la cabeza. Kevin fue arrestado en Juncos junto a Ismael E.I.V., un ciudadano de origen marroquí de 24 años. La Policía sospecha que Ismael es el otro tirador, aunque no está completamente acreditado.
La Policía está cotejando huellas, pruebas de ADN, testimonios de testigos e imágenes de cámaras de seguridad para esclarecer el papel de Ismael, quien podría ser solo un encubridor. La investigación sigue abierta, ya que podría haber otro asesino por detener. También se investiga si alguien recogió a los tiradores en el entorno norte de la M-40 para trasladarlos a Yuncos, así como el papel de un coche azul mencionado por testigos.
El miércoles, la Policía arrestó a una cuarta persona, Omar, otro ciudadano de origen marroquí, quien quedó en libertad con cargos tras comprobar que no tenía relación directa con el homicidio. Omar dio cobijo a los presuntos asesinos en una casa okupa.
Los agentes del Grupo V de Homicidios de la Policía Nacional de Madrid investigan las causas del asesinato. Cada vez está más claro que Borja Villacís no era el objetivo de los detenidos, quienes iban fuertemente armados para lo que parece ser una emboscada. Borja habría acudido como mediador en un conflicto derivado de una denuncia contra Kevin por destrozar un coche. No se descarta la posibilidad de que el crimen esté relacionado con el narcotráfico, dado que varios de los involucrados tienen antecedentes en este sentido.
