Hermoso niega haber consentido el beso de Rubiales y denuncia que le "faltó al respeto"
La futbolista Jennifer Hermoso ha negado este lunes haber dado permiso a Luis Rubiales para besarla en la boca durante la celebración del Mundial femenino en Sídney y ha asegurado que el expresidente de la Real Federación Española de fútbol (RFEF) le "faltó al respeto" en uno de los momentos más importantes de su vida.
En su declaración ante la Audiencia Nacional, Hermoso ha relatado que el beso fue completamente fuera de contexto y que lo único que sintió en ese momento fue que su jefe le estaba besando, algo que, según ha subrayado, "no debe ocurrir en ningún ámbito laboral o social".
La jugadora ha señalado que lo sucedido empañó lo que debía haber sido un día de alegría, asegurando que "en ningún momento buscó ese acto ni se lo esperaba". Ha detallado que, en el momento de la entrega de medallas, tras saludar a la Reina y a la Infanta, se encontró con Rubiales, quien la abrazó y le dijo "hemos ganado este Mundial gracias a ti", antes de sujetarle la cabeza con ambas manos y besarla.
Un juicio con gran expectación y rechazo a las cuestiones previas
La vista oral ha comenzado con el análisis de cuestiones previas planteadas por las partes. El magistrado José Manuel Fernández-Prieto ha rechazado todas las solicitudes, incluyendo la petición de la defensa de Rubiales de incorporar imágenes del túnel de vestuarios tras la final del Mundial, así como la dispensa de asistencia al juicio solicitada por Albert Luque, otro de los acusados por coacciones.
Rubiales, que se enfrenta a una pena de 2 años y 6 meses de cárcel, ha mantenido hasta ahora que el beso fue consentido, versión que Hermoso ha desmentido rotundamente ante el tribunal.
