Louzán reconoce que el arbitraje aún genera controversia en el fútbol español

El presidente de la Real Federación Española de fútbol (RFEF), Rafael Louzán, admitió este lunes que la cuestión arbitral continúa siendo un asunto pendiente de mejora tras su primer año de mandato, al considerar que “sigue haciendo ruido” en el fútbol español, si bien matizó que en numerosas ocasiones ese malestar resulta injustificado.

En este contexto, reclamó la colaboración de los clubes para avanzar hacia un arbitraje de mayor calidad.

Durante su intervención en la Asamblea General Extraordinaria celebrada en el Salón Luis Aragonés de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas (Madrid), Louzán reconoció que, pese a las medidas adoptadas, el arbitraje continúa siendo uno de los focos de mayor polémica. En respuesta a una pregunta formulada por Alfonso Díaz, CEO de Negocio del RCD Mallorca, explicó que “el tema arbitral hace mucho ruido” y que, precisamente por ello, sigue siendo una de las cuestiones a abordar.

El máximo dirigente federativo sostuvo que el exceso de polémica dificulta un análisis sereno del trabajo arbitral y defendió que deben prevalecer la transparencia y la meritocracia. En este sentido, señaló que las interpretaciones contradictorias de una misma jugada por parte de clubes rivales alimentan un clima que no favorece la objetividad ni la comprensión del arbitraje.

Con el objetivo de reducir ese clima de confrontación, Louzán recordó que la RFEF ha impulsado iniciativas como el programa ‘Tiempo de Revisión’, destinado a analizar las jugadas y fomentar una mayor concienciación colectiva. A su juicio, este sistema contribuye a reforzar la sinceridad y el compromiso con el arbitraje español, al permitir explicar con claridad las decisiones y reconocer los posibles errores de los colegiados.

En la misma línea, defendió la profesionalidad del colectivo arbitral y subrayó que el error humano forma parte inherente del deporte. Por ello, instó a los equipos a “buscar otra excusa” cuando surgen polémicas, al tiempo que reivindicó que el arbitraje español se sitúa entre los cinco mejores del mundo, con la aspiración de alcanzar la primera posición gracias al alto nivel existente.

Finalmente, Louzán apeló de forma directa a la responsabilidad compartida de todo el fútbol español y pidió a los clubes y entrenadores que contribuyan a mejorar el entorno arbitral, ya que, en su opinión, sin su implicación resulta imposible reducir el ruido. Asimismo, destacó que el sistema arbitral español cuenta con la mejor tecnología y los mejores medios, tanto en las competiciones profesionales como en la Liga F, la Primera RFEF y las principales categorías del fútbol sala.