Los obispos votarán el plan de reparación a las víctimas de abusos

La Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha convocado una Asamblea Plenaria Extraordinaria para el próximo martes, 9 de julio, con el propósito de someter a votación el Plan de Reparación Integral a las Víctimas de Abusos sexuales a menores y personas vulnerables equiparadas en derecho (PRIVA).
El portavoz y secretario general de la CEE, César García Magán, explicó que el plan está destinado a aquellas víctimas cuyos casos han prescrito o en los que el abusador ha fallecido, y que no pueden ser juzgados por la vía civil, penal o canónica. García Magán garantizó que habrá reparación económica, aunque no detalló cómo se financiará este plan. "Habrá, por supuesto, reparación económica a las víctimas que así lo soliciten. Está previsto", enfatizó, destacando que la reparación será integral e incluirá apoyo técnico, psicológico, médico y espiritual.García Magán no especificó los pormenores del PRIVA, esperando a la votación en la Asamblea Plenaria, que requerirá una mayoría de dos tercios. El plan establece criterios para determinar qué se considera una víctima, sin fijar una cifra concreta de víctimas. Tampoco se ha aclarado si la Iglesia participará en el fondo estatal propuesto por el Gobierno para indemnizar a las víctimas, aunque el Ejecutivo ha sido informado del plan a través de la comisión bipartita entre el Gobierno y los obispos.
El PRIVA ha sido elaborado por el Servicio de Asesoramiento de las Oficinas para la protección de menores, incorporando observaciones de los obispos y otros organismos. Este plan también recoge indicaciones del informe del Defensor del Pueblo y se ha elaborado tras reuniones con las víctimas, algunas de las cuales han sido públicas y otras no.
Sobre la presencia de víctimas de abusos en la Asamblea Plenaria Extraordinaria, García Magán indicó que los encuentros serán siempre discretos. "Por nuestra parte nunca vamos a decir lo que las víctimas han dicho aquí", afirmó, manteniendo la confidencialidad sobre la participación de víctimas y asociaciones.
En la Comisión Permanente también se discutieron otros asuntos, como la situación de las monjas clarisas de Belorado que decidieron dejar la Iglesia Católica, un tema que, aunque no se trató oficialmente, fue discutido en intervalos informales. García Magán calificó esta situación de "muy lamentable" y expresó su preocupación por la ruptura de la comunión eclesial.
También se abordó la controversia sobre los mosaicos del sacerdote y artista esloveno Marko Rupnik, acusado de abusos. García Magán mencionó que no se ha decidido aún si se retirarán los mosaicos de la capilla de la sede de la CEE, indicando que la cuestión sigue abierta.
Jesús Vidal, presidente de la Subcomisión Episcopal para los Seminarios, presentó el borrador del Plan de aplicación de los criterios para la reforma de los seminarios en España, basado en un documento recibido en noviembre pasado. Este borrador será estudiado en la próxima Asamblea Plenaria de noviembre.
Francisco Conesa, presidente de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe, propuso la redacción de una declaración con motivo del 1.700 aniversario del Concilio de Nicea, como una invitación a renovar la fe de Nicea en una celebración ecuménica.
Finalmente, la Comisión Permanente aprobó el calendario de actividades de la CEE para 2025, que incluye ejercicios espirituales y varias Asambleas Plenarias y reuniones de la Comisión Permanente a lo largo del año.