Carmena mantendrá el patrocinio de las empresas en la cabalgata de Reyes

El Ayuntamiento de Madrid gobernado por la alcaldesa Manuela Carmena mantendrá los patrocinios de empresas en la cabalgata de Reyes de la ciudad de este año, así como el diseño y el presupuesto heredado del equipo de Gobierno anterior, según ha indicado este lunes la concejal delegada de Cultura, Celia Mayer.

En una conversación con periodistas posterior a la Comisión de Cultura del Ayuntamiento, Mayer ha explicado que las cuentas de este año ya tenían consignado un dinero para esa cabalgata que se va a mantener, y ha dicho además que habrá una Feria del Libro infantil en Navidad.

En la comisión, Celia Mayer ha reivindicado que la cabalgata es un "valor de la ciudad" que desde el equipo de Gobierno municipal van a seguir defendiendo, además de concretar que este año el lema girará en torno a "la magia" y habrá tres plataformas móviles: una sobre astronomía, otra sobre magia, y otra sobre navegación.

El pasado 9 de septiembre, el director general de Programas y Actividades Culturales del Ayuntamiento, Jesús María Carrillo, dijo que se redefiniría este año la Cabalgata de Reyes para alejarla del "carácter comercial" de los últimos años y tratar de separar la "magia y la ilusión" que rodea a ese día del concepto de consumo, algo que aseguró que se iba a hacer con "cariño y cuidado".

Preguntada sobre posibles cambios para el próximo año en la cabalgata de Reyes, la delegada del área ha dicho que aún no se ha tomado una decisión al respecto.

Sí habrá al menos una diferencia: la cabalgata de reyes de las próximas navidades tendrá un rey Baltasar de negro, según avanzó la semana pasada en un comunicado la concejal socialista Mar Espinar, que dijo que el actual equipo de gobierno había asumido la petición socialista.

Tradicionalmente, en la ciudad de Madrid son concejales los que asumen el papel de los Reyes Magos, lo que ha provocado que, debido a la ausencia de ediles de color en la corporación, históricamente siempre hayan tenido que representar a Baltasar ediles con la cara pintada.