La doctora Vilma Pacheco Barcia, oncóloga médica del Hospital de Torrejón, presentó a principios de julio en Barcelona los resultados del proyecto de investigación PANTHEIA-SEOM, en el marco del congreso europeo ESMO Gastrointestinal Cancers 2025.
El estudio analiza factores pronósticos y predictivos de respuesta en pacientes con cáncer de páncreas metastásico y pone de relieve la importancia del estado nutricional en la evolución de la enfermedad.
Según las conclusiones, un estado nutricional deficiente podría asociarse con menor tolerancia a la quimioterapia y, en algunos casos, con un pronóstico menos favorable. “Estamos evaluando la evolución de los pacientes desde el punto de vista de la inflamación sistémica y cómo se asocia a desnutrición, caquexia y trombosis”, explicó la doctora.
En declaraciones a Televisión, Pacheco subrayó que la inflamación sistémica elevada se relaciona con peor respuesta a los tratamientos quimioterápicos, mayor riesgo de desnutrición y más probabilidades de sufrir trombosis. El proyecto, avalado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y enmarcado en la Sección SEOM de Evaluación de Resultados, se basa en la tesis doctoral de la especialista.
Durante el último año, la investigación se ha centrado en el estudio de la inflamación sistémica, la desnutrición y la caquexia. Además, se ha evaluado la sarcopenia mediante herramientas de Inteligencia Artificial y se ha prestado especial atención a la trombosis.
El comité científico del proyecto lo integran la doctora Paula Jiménez Fonseca, del Hospital Central de Asturias, y el doctor Andrés Muñoz, del Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Más de 40 investigadores procedentes de 28 hospitales y centros de investigación de toda España participan en el trabajo, entre ellos el Instituto IMDEA Alimentación y el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL).
Oncólogos, endocrinólogos, investigadores básicos e ingenieros conforman un equipo con un enfoque integral que permite abordar el cáncer de páncreas metastásico desde distintas perspectivas.
Pacheco destacó que actualmente no existen herramientas precisas para predecir la evolución de la enfermedad, pero confía en que el estudio ayude a identificar qué pacientes presentan mayor riesgo. La investigación, de carácter no intervencionista, realiza un seguimiento prospectivo de los pacientes, evaluando los cambios nutricionales y de inflamación.
“Nuestra meta es avanzar hacia una medicina de precisión, con tratamientos más personalizados”, señaló la doctora, quien insistió en la importancia de comprender las complicaciones asociadas a esta patología oncológica.