El Partido Popular ha votado en la Asamblea en contra de prohibir el velo islámico en espacios públicos abiertos y cerrados, incluyendo escuelas, universidades y hospitales, argumentando que esta prohibición justificada en motivos religiosos sería "ilegal" al contravenir la Constitución y convertiría a España "de facto en un país laico".
"Nos convertiría de facto en un país laico y no en un país aconfesional, tal y como dice la Constitución española. El laicismo es la puerta a no creer en nada. Es la puerta a ser Francia. Es la puerta a no ser nada, ni nadie", ha alertado el diputado 'popular' Rafael Núñez Huesca.
Así, el diputado del PP ha defendido que su partido quiere que España sea un país donde "una niña pueda ser libre de salir de casa como quiera",y también donde "un judío pueda llevar una kipá", donde se pueda llevar un crucifijo o donde "alguien pueda ir tatuado hasta las orejas si es que así lo quiere".
La portavoz de VOX en la Asamblea de Madrid, Isabel Pérez Moñino, ha sido la encargada de presentar la PNL en la que proponía prohibir el velo islámico pues "no es una prenda inocente" sino "una herramienta política del islamismo diseñada para someter a las mujeres".
Moñino ha aseverado que desde su partido no van a permitir que "el islamismo se infiltre en las leyes" ni que ese "trozo de tela", como se ha referido al velo, "culpabilice a las niñas". "España es tierra de mujeres libres", ha aseverado la diputada de Vox desde la tribuna de oradores de la Asamblea.
Por su parte, Más Madrid también ha votado en contra de la propuesta y su diputada Jimena González Gómez ha argumentado su posición en que la PNL de Vox no incluye más que "mentiras". "Nos gusta la diversidad, lo que no nos gusta son los nazis, señora Moñino", ha espetado.
La socialista Cristina González Álvarez ha tachado la iniciativa de Vox como "un panfleto cargado de odio, bulos y racismo", y lamentado que "recuerda a muchas etapas históricas de señalamiento al diferente" que nunca pensó que volverían a sonar en la sociedad.
González Álvares ha aprovechado la ocasión para defender la causa Palestina a las críticas del PP a los manifestantes propalestinos del domingo pasado en Madrid, a los que incluso se llegó a tachar de "gentuza". "El PP dice que le gusta la fruta, a nosotros nos gusta la sandía", ha señalado aludiendo a la fruta con la que metafóricamente se alude a Palestina por tener los mismos colores que su bandera.