La comunión de la infanta Sofía reúne la familia al completo en Aravaca

La comunión de la infanta Sofía, "un poquito" nerviosa y muy cariñosa con sus padres y su hermana Leonor, ha permitido hoy volver a ver en público a La Familia Real al completo, por primera vez en casi 10 meses, y junto a los abuelos maternos y la bisabuela de las hijas de los Reyes.

Muy sonriente ante las cámaras en el exterior del templo, Sofía ha abrazado a sus padres y de forma especialmente efusiva a su hermana en el saludo de la paz, al final de la ceremonia religiosa, durante la que ella ha leído un extracto de uno de los salmos y la Reina Sofía ha demostrado su afición a la fotografía tomando instantáneas de su nieta, según ha relatado después algún invitado.

Como hace dos años en la comunión de la Princesa Leonor, los medios gráficos no han podido acceder al interior de la iglesia para seguir la ceremonia, que ha durado casi una hora y en la don Felipe y doña Letizia, esta vez con su hija mayor, se han vuelto a sentar en la segunda fila de bancos, de acuerdo con una distribución de asientos que sigue el orden alfabético de los apellidos.

Unas filas más atrás, junto a otros familiares del resto de niños que tomaban la comunión, una veintena, don Juan Carlos y doña Sofía seguían ilusionados el momento en el que su nieta recibía la Eucaristía, junto a sus compañeros, entre los cánticos del coro de su colegio, el Santa María de los Rosales del barrio, próximo a la parroquia, donde también estudió don Felipe.

Tanto a su llegada como a la salida de esta modesta parroquia de la Asunción de Nuestra Señora, en el barrio madrileño de Aravaca, las decenas de vecinos del barrio que aguardaban tras las verjas de la iglesia han arropado a los Reyes y a sus hijas con vítores y aplausos.

"Me gusta la monarquía. Veo que son sencillos y que lo hacen bien", ha comentado un jubilado ante el hecho de que la infanta Sofía haya hecho la comunión con el uniforme del colegio y con sus compañeros.

Antes del inicio de la ceremonia, han posado sonrientes para los numerosos fotógrafos y cámaras de televisión los Reyes y sus hijas acompañadas por don Juan Carlos -que elogiaba y señalaba espontáneamente con su bastón los zapatos azules de Leonor- y doña Sofía, en la primera imagen pública de los seis integrantes de la Familia Real desde el 31 de julio de 2016.

Aquel día, en Mallorca, Felipe VI y la Reina Letizia, con sus dos hijas, cenaron junto a don Juan Carlos, doña Sofía y la Infanta Elena, acompañada también de sus dos hijos, en un conocido restaurante de Puerto Portals, en el municipio de Calviá, la víspera del inicio de las actividades institucionales veraniegas del Monarca en Baleares.

Hoy, a la Familia Real se han unido para una tercera imagen previa a la comunión los padres de doña Letizia, Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz, y su abuela paterna, María del Carmen Álvarez del Valle, así como el príncipe Konstantin de Bulgaria, padrino de bautizo de Sofía, que ha asistido también a la ceremonia, al igual que la actual esposa de su abuelo materno, Ana Togores.

A don Juan Carlos se le ha visto de muy buen humor y, además de bromear con su nieta Leonor durante el posado previo a la entrada en la iglesia, ha conversado sonriente en el exterior del templo tanto con doña Sofía como con la Reina Letizia.

El desarrollo de la ceremonia de hoy ha seguido el mismo esquema que el de la comunión de la Princesa de Asturias oficiada en la misma parroquia y por el mismo capellán del colegio, fray Javier, el 20 de mayo de 2015.

En este caso, era el vestido azul claro que lucía Leonor el que contrastaba con la chaqueta azul marino con el escudo del colegio, la corbata y la falda gris que llevaba Sofía, quien ha tomado la comunión con el uniforme del colegio Santa María de los Rosales, al igual que el resto de compañeros de clase.

Salvo el grupo de vecinos que ha contemplado la entrada y salida de los familiares de Sofía sin abandonar su posición junto a las rejas del recinto, los habitantes del casco antiguo de Aravaca seguían con sus actividades cotidianas ajenos a esta ceremonia, tras la que la infanta ha celebrado su comunión en familia con un almuerzo en La Zarzuela.

A este almuerzo, ofrecido por don Felipe y doña Letizia, se desconoce si asistirán otros familiares, como doña Elena o la infanta Cristina, que acudió hace dos años con su hija Irene al que se organizó tras la comunión de la Princesa Leonor, aunque la Casa del Rey no confirmó ese extremo.

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