La Comunidad de Madrid rechaza la imposición de la jornada laboral de 37,5 horas
La consejera de Economía, Hacienda y Empleo de la Comunidad de Madrid, Rocío Albert, ha rechazado la reducción obligatoria de la jornada laboral que aprobará este martes el Consejo de Ministros, advirtiendo que “no significará más contrataciones” y supondrá un grave perjuicio para autónomos y pequeños empresarios.
El Ejecutivo central aprobará el anteproyecto de ley que rebajará la jornada laboral a 37,5 horas semanales sin reducción salarial, tras un año de negociaciones entre el Ministerio de Trabajo y el de Economía.
Desde el Gobierno madrileño han reiterado su oposición frontal a esta medida. “Estamos completamente en contra”, ha enfatizado Albert, quien ha subrayado que la reducción de jornada debe ser fruto del acuerdo entre empresas y sindicatos, y no una imposición estatal.
Albert ha recordado que más de 11.000 convenios colectivos ya contemplan esta jornada y ha advertido de que la imposición de un límite generalizado afectará gravemente a sectores como el comercio y los servicios.
Según ha detallado, el coste que deberán asumir los comerciantes y hosteleros ascenderá a 2.635 millones de euros, lo que obligará a muchas pequeñas empresas a tomar decisiones drásticas.
“Si en una empresa hay dos o tres empleados, el dueño tendrá que cerrar o asumir la carga de trabajo él solo”, ha alertado la consejera, señalando que Francia ya ha experimentado esta situación sin que se tradujera en un aumento del empleo.
