La dieta mediterránea, lo mejor para la memoria

La dieta mediterránea se caracteriza por ser rica en frutas, verduras, granos enteros y pescado, y baja en carne roja. Si a esta sana variedad le añadimos más aceite de Oliva o nueces ayudaremos a que nuestro cerebro se mantenga alerta conforme avanza la edad.
Esto es lo que propone el nuevo estudio de un grupo de investigadores españoles encabezado por el doctor Emilio Ros, director de la Sección de Lípidos en el Servicio de Nutrición y Dietética del Hospital Clínico y Provincial de Barcelona. Descubrieron que los adultos mayores que siguen este tipo de dieta tuvieron mejores resultados en agilidad mental y la memoria que las personas que sólo siguieron una dieta baja en grasas.
"Se puede retrasar la aparición del deterioro mental relacionado con la edad al seguir una dieta balanceada rica en comidas con un alto nivel de antioxidantes, como el aceite de oliva y las nueces", dijo el doctor Emilio Ros. "Dado que la edad promedio de los pacientes era de 67 años cuando empezó el estudio, se podría decir que nunca es demasiado tarde para cambiar a una dieta que mantenga o incluso mejore las agilidad mental", comentó el experto.
Para el estudio, Ros y sus colegas recopilaron datos de casi 450 adultos entre los años 2003 y 2009. Todos los participantes tenían un alto riesgo de presentar cardiopatías, pero no habían reportado problemas de memoria o agilidad mental.
A los participantes se les asignó al azar aumentar un litro de aceite de oliva extra virgen por semana a la dieta mediterránea, o suplementarla con 30 gramos diarios de una mezcla de nueces, avellanas y almendras, el resto de los pacientes siguieron una dieta reducida en grasas.
Los cambios cognitivos se fueron evaluando con una serie de pruebas de memoria, atención, y razonamiento. Los científicos tenían información completa para casi 350 pacientes quienes siguieron las dietas durante cuatro años. Los científicos vieron mejoras en las pruebas de memoria y razonamiento en los dos grupos que siguieron la dieta mediterránea, comparados con los pacientes de la dieta reducida en grasas.
Samantha Heller, nutrióloga clínica en el Centro Médico de la Universidad de Nueva York, explicó que "las grasas saludables que contienen alimentos como el aceite de oliva o las nueces son cruciales para el funcionamiento y la salud del cerebro".
¿Cómo afectan a nuestro cerebro?
Cada una de las neuronas del cerebro está rodeada por una capa delgadísima de grasa y proteína llamada vaina de mielina, explicó. La vaina de mielina protege la estructura nerviosa y ayuda a la interacción celular. El cerebro utiliza las grasas de los alimentos para construir y reparar esta vaina de mielina. Mientras más sanas sean las grasas que consumimos, más saludable será el cerebro, comentó Sanantha Heller.
Heller indicó que el ácido oleico es una de las grasas más comunes en la vaina de mielina. "El aceite de oliva, las almendras, las nueces, las nueces de macadamia, el maní y los aguacates son todas buenas fuentes de esta grasa. Los ácidos grasos Omega-3 también son importantes para la salud cerebral y se encuentran en pescados, avellanas y productos de soja. Se ha demostrado que estas grasas saludables mejoran las funciones cognitivas y la salud del cerebro, además de reducir el riesgo de presentar mal Alzheimer", dijo.
Heller sugirió implementar cambios en la dieta como cocinar con aceite de oliva en lugar de mantequilla, comer almendras en lugar de papas fritas, y sustituir carne por vegetales al preparar una pasta.