Ayuso anuncia un plan regional contra las drogas con 50 medidas de prevención y control

La Presidenta del Gobierno regional , Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado este martes la presentación de un plan regional contra las drogas, que incluirá 50 medidas enfocadas principalmente en la prevención, con especial atención a los jóvenes, además de limitar el consumo de productos derivados del cannabis, aumentar las inspecciones y ofrecer nuevos servicios y tratamientos.
En una entrevista con 'esRadio', Ayuso subrayó que las drogas "destruyen vidas porque conducen directamente a la marginalidad" y destacó la gravedad de los datos sobre el consumo en la región.
El plan, elaborado con la colaboración de todas las consejerías, se estructura en cuatro ejes principales: prevención e información, asistencia y atención, reinserción y vigilancia y monitorización. En el ámbito de la prevención, se contempla una modificación de la Ley sobre Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos para proteger más a menores y adolescentes. Entre las medidas se incluyen restricciones a la venta y suministro de derivados del cannabis a menores, con requisitos como la presentación de un documento oficial que acredite la edad en establecimientos y la incorporación de sistemas de verificación de identidad en máquinas expendedoras.
Se limitará la publicidad y patrocinio de productos derivados del cannabis, prohibiendo su difusión a menos de 300 metros de centros educativos, y se intensificarán las inspecciones en los establecimientos. Además, se controlará la venta de artículos promocionales y se prohibirá asociar estos productos con beneficios para la salud o mejoras en el rendimiento físico.
Para abordar la prevención en los espacios donde se congregan adolescentes, se pondrá en marcha un servicio móvil e itinerante para informar y sensibilizar sobre los riesgos asociados a las drogas. Este servicio colaborará con entidades locales para organizar actividades de Promoción de la salud y talleres en Centros de Formación para el Empleo. También se desarrollará una aplicación móvil que brindará información sobre los peligros del consumo y recursos de ayuda, y se incluirán servicios a través de la Tarjeta Sanitaria Virtual con actividades formativas, algunas dirigidas a padres.
En el ámbito escolar, se reforzará la formación sobre drogodependencias para directores y profesores, y se creará una Cátedra de I+D+i con universidades para investigar la prevención del uso de estupefacientes. Además, se impulsará un programa para prevenir el uso inadecuado de tecnologías y comunicación entre los alumnos. La figura del agente tutor en centros escolares también se verá reforzada mediante un curso específico para policías locales enfocado en la prevención del consumo de sustancias adictivas.
El plan contempla la creación de una red integral de atención que colaborará con los Centros de Tratamiento de Adicciones, con personal especializado en prevención e intervención para personas con conductas de riesgo o problemas de consumo. Se prevé la apertura de dos nuevos centros para la Prevención, Tratamiento e Investigación del Trastorno por Juego, y la expansión de la Unidad de Ingreso y Hospital de Día de Desintoxicación para adolescentes, que ofrecerá atención psiquiátrica, psicológica y médica.
Se fortalecerán los programas de atención a personas sin hogar, un colectivo en el que se estima que la mitad padece algún tipo de adicción, y se establecerán normativas para la contratación de servicios de atención residencial para menores con adicciones graves. Además, se ampliará la Red de Atención Ambulatoria a Drogodependientes, compuesta por 24 dispositivos distribuidos por la región, para ofrecer apoyo tanto a los afectados como a sus familias.
El plan también incluye itinerarios de empleo para personas con adicciones, con el objetivo de facilitar su inserción laboral tras los procesos de desintoxicación. Se implementará un sistema de alerta temprana para detectar nuevas sustancias psicoactivas y se intensificarán las inspecciones de derivados del cannabis, incluyendo análisis de aguas residuales y estudios poblacionales para evaluar los hábitos de consumo.
La Dirección General de Salud Pública ha iniciado una estrategia de control e inspección de productos alimenticios que contienen derivados del cannabis, incluyendo la revisión de más de una docena de webs asociadas a la venta de estos productos. Se ha constatado que muchos de estos artículos, como gominolas, piruletas y vapeadores, pueden contener principios activos de cannabinoides, lo que representa un riesgo añadido.