Ayuso acusa al Gobierno de "reanimar el Franquismo" y recurrirá para que no se use la Real Casa de Correos
la Presidenta del Gobierno regional, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado que recurrirá "en todos los frentes posibles" la intención del Gobierno central de declarar la Real Casa de Correos, sede de la Presidencia regional, como Lugar de Memoria en el marco de la Ley de Memoria Democrática. Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Ayuso ha calificado esta iniciativa como parte de una estrategia del Ejecutivo de "reanimar el Franquismo" y avivar el "guerracivilismo".
Críticas a la "manipulación de la historia"
Ayuso ha señalado que la Ley de Memoria Democrática, aprobada por el Gobierno central, no busca promover la reconciliación, sino "dinamitar la Transición" y utilizar la historia como arma política. "El guerracivilismo no vencerá", afirmó, acusando al Ejecutivo de Pedro Sánchez de manipular los símbolos históricos para polarizar a la sociedad.
La presidenta regional ha defendido la importancia histórica de la Real Casa de Correos, destacando que el edificio no puede ser reducido a los significados específicos que el Gobierno pretende asignarle. Según Ayuso, el Gobierno busca enfatizar su uso durante la dictadura franquista, mientras ignora su papel como Ministerio de Gobernación durante el Frente Popular, periodo que, según ha señalado, también estuvo marcado por represiones y asesinatos.
"No habría mármol para tanta placa"
Ayuso ha cuestionado el enfoque selectivo del Gobierno sobre el pasado histórico del edificio, recordando los crímenes asociados al gobierno del Frente Popular durante los inicios de la Guerra Civil. "No habría mármol para tanta checa y tanta placa", ironizó, señalando que el edificio tiene una historia mucho más amplia y no puede reducirse al uso que tuvo en una etapa concreta.
La presidenta destacó además que fue Joaquín Leguina, el primer presidente de la Comunidad de Madrid y miembro del PSOE, quien trasladó la sede de la Presidencia regional a la Real Casa de Correos. "Un socialista honrado, que entendía el valor de este lugar como símbolo de unidad y progreso", apuntó.
Para frenar la declaración del edificio como Lugar de Memoria, la Comunidad de Madrid llevará el caso al Tribunal Constitucional y emprenderá acciones en todas las instancias disponibles dentro de sus competencias. Ayuso se mostró confiada en que este desafío jurídico no solo protegerá el significado histórico del edificio, sino que también servirá como un frente contra lo que considera un uso partidista de la memoria histórica.
"Nosotros defendemos una historia común, basada en la reconciliación, no en la división. Aquí sigue lo mejor de España, intacto, con ganas de vivir juntos y en libertad", concluyó.
