Los reyes, en el funeral por la infanta Pilar junto a la familia y las instituciones

Los reyes, junto a don Juan Carlos y doña Sofía, las infantas Elena y Cristina, otros miembros de su familia y representantes de diversas instituciones han asistido en la basílica del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial al funeral por la infanta Pilar de Borbón.
Desde una hora antes del inicio de la ceremonia ha ido llegando a la iglesia el medio millar de asistentes a este funeral que ha comenzado al mediodía y que ha sido oficiado por el arzobispo castrense, monseñor Juan del Río.
Una misa que se ha celebrado veintiún días después del fallecimiento de la duquesa de Badajoz a los 83 años de edad.
Felipe VI y doña Letizia han accedido por la entrada principal del Monasterio y a las puertas del templo han saludado a los hijos de la infanta Pilar: Simoneta, Juan, Bruno, Luis y Fernando.
Cuando han entrado a la basílica a los acordes del himno nacional ya se encontraban allí don Juan Carlos y doña Sofía, situados delante de la primera fila de bancos y a los que los reyes han saludado antes de ocupar su sitio preeminente a la derecha del altar.
Detrás de don Juan Carlos y doña Sofía han tomado asiento las infantas Elena (que ha estado acompañada por sus hijos Felipe y Victoria Federica) y Cristina y los representantes de otras casas reales que han acudido al funeral.
Entre ellos, la princesa Beatriz de Holanda, Margarita de Bulgaria, Ana de Francia, el duque de Braganza, María Astrid de Luxemburgo, Beatriz de Orleans (junto a varios miembros de su familia) y Pedro Borbón-Dos Sicilias, duque de Calabria.
A la izquierda del altar se han sentado los hijos de doña Pilar, así como otros familiares entre los que se encontraba su hermana, la infanta Margarita, quien ha estado acompañada por su esposo, Carlos Zurita.
Por parte de las instituciones de Estado han estado la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo; la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; el del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas; y el del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes.
También la Presidenta del Gobierno regional, Isabel Díaz Ayuso; el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y la alcaldesa de San Lorenzo de El Escorial, Carlota López Esteban.
Los asistentes han escuchado la homilía del arzobispo castrense en la que ha destacado la personalidad de doña Pilar, su cercanía y generosidad con las personas necesitadas y el hecho de que siempre fuera una "fiel servidora de España".
Ha destacado especialmente su apoyo a su hermano, el Rey Juan Carlos, en la "tarea histórica" de la reconciliación entre españoles con el regreso de la monarquía parlamentaria.
"Fue una gran mujer de su tiempo", ha añadido antes de invitar a su familia a recoger ese testigo de entrega y amor a España.
El nuncio del Vaticano en España, Bernardito Auza, ha sido otro de los oficiantes del funeral, en el que entre los asistentes se encontraban igualmente el duque de Alba y sus hermanos Eugenia y Fernando; la baronesa Thyssen (que ha llegado junto al exministro José María Michavila), su hijo Borja y su esposa, Blanca Cuesta; y Luis Alfonso de Borbón y su esposa.
A ellos se han sumado el vicepresidente primero del Comité Olímpico Internacional, Juan Antonio Samaranch, y el presidente de la ONCE, Miguel Carballeda, como representantes de dos instituciones muy ligadas a la actividad de la duquesa de Badajoz.
También han estado representantes del Consejo de la Grandeza y del Consejo de las Reales Órdenes y otros dirigentes o exdirigentes políticos como Esperanza Aguirre o Begoña Villacís.
La hermana mayor del rey Juan Carlos falleció el pasado 8 de enero a los 83 años a causa de un cáncer de colon que se le detectó a comienzos de 2019.
Sus restos mortales fueron incinerados y por expreso deseo suyo sus cenizas fueron depositadas en el panteón familiar del cementerio de San Isidro en el que también está enterrado su esposo, Luis Gómez-Acebo.
De esa forma renunció a ser enterrada en el Real Monasterio de El Escorial, una posibilidad a la que tenía derecho por su condición de infanta de España.
Además del funeral en la basílica del monasterio, la familia de doña Pilar ha comunicado que habrá otro de carácter más amplio y que se oficiará a las siete de la tarde del próximo viernes en la Catedral de la Almudena.
La última vez que los reyes asistieron a una celebración religiosa en la basílica del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial fue el 3 de abril de 2018, cuando presidieron una misa por don Juan de Borbón a los 25 años de su fallecimiento y a la que acudieron también los reyes Juan Carlos y Sofía.
Una misa en la que la expectación de los medios informativos se centró en la infanta Cristina ya que era la primera ocasión que coincidía con los reyes en un acto público desde el año anterior.
Doña Cristina ha estado presente en el funeral de este miércoles y también coincidió con los reyes el pasado 10 de enero cuando la familia de doña Pilar acudió al cementerio de San Isidro para depositar sus cenizas.