Alcorcón reclamará a Móstoles que asuma los costes producidos por el Festival Amanecer Bailando

El Ayuntamiento de Alcorcón realizará un estudio de los costes provocados por el Festival Amanecer Bailando, celebrado el pasado día 8 en el Parque Prado Ovejero de Móstoles, con objeto de reclamar al Ayuntamiento de Móstoles "las cuantías producidas" en el barrio limítrofe de Fuente Cisneros.
Además, instará al Consistorio del municipio vecino a que asuma, "directamente, o a través de la organización del evento, el gasto en el que incurrieron los vecinos de Fuente Cisneros" que "se vieron obligados a dejar sus casas" a causa del ruido, por tener niños pequeños o personas enfermas, entre otras circunstancias.
El Festival Amanecer Bailando, que aunque se celebró en el término municipal de Móstoles afectó directamente al barrio limítrofe de Fuente Cisneros de Alcorcón, congregó entre los pasados días 8 y 9 a unas 25.000 personas en un macrofestival de música moderna de más de 17 horas de duración.
El alcalde de Alcorcón, David Pérez (PP), intentó que el evento se cancelara "cautelarmente" llevándolo a la Fiscalía de Medioambiente, aunque finalmente no lo consiguió, por lo que desde la Concejalía de Seguridad se puso en marcha un operativo de vigilancia y seguridad que concluyó con al menos trece denuncias.
"Nos hemos visto obligados a realizar un trabajo extra para cubrir la seguridad de los vecinos de Alcorcón en Fuente Cisneros y, al mismo tiempo, no descuidar la seguridad de la celebración de nuestras fiestas patronales", afirmó entonces Pérez, quien criticó "el desprecio" mostrado por la alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse.
El primer edil, quien ya avisó la misma noche del festival que actuarían legalmente, ya adelantó que se habían tomado registros de los volúmenes de sonido y que con ello valorarían tomar otras medidas, ya que "no se puede vulnerar así los derechos de la gente, y el derecho al descanso es un derecho fundamental".
Ahora, el Pleno municipal ha apoyado, con los votos a favor del PP y Ciudadanos, que las concejalías implicadas elaboren un estudio sobre los costes producidos por la celebración del Festival, además de exigir "una disculpa ante los vecinos de Fuente Cisneros, que sufrieron unas molestias y un volumen intolerable de ruido".
En este sentido, el Ayuntamiento de Alcorcón ya habilitó en los días posteriores al evento un servicio de atención y asesoramiento para los vecinos del barrio de Fuente Cisneros con el objetivo de recabar la mayor información posible sobre las molestias causadas por la celebración de dicho Festival.