Manolo García triunfa en Madrid con un emotivo concierto

El WiZink Center de Madrid se vistió de gala este jueves para recibir a Manolo García, quien ofreció un concierto inolvidable de más de tres horas ante un recinto completamente lleno.
El evento, que había agotado todas las entradas hace meses, marcó el regreso del cantante a los grandes escenarios con su gira 'Cero Emisiones Contaminantes Desde Ya'. En este espectáculo, García combinó éxitos de su carrera solista con recordados temas de 'El último de la Fila', el grupo que cofundó junto a Quimi Portet y que se disolvió hace más de veinte años.
El concierto comenzó a las 20:30 con los acordes de 'Insurrección', uno de los clásicos más esperados, en un ambiente oscuro que pronto se llenó de la voz de los fans. Durante la noche, García dedicó el evento a diversas causas sociales, incluyendo un especial recuerdo al pueblo de Palestina, a los pequeños agricultores y ganaderos, y a los trabajadores de las discográficas, destacando la importancia de su labor en el mantenimiento del país.
La puesta en escena fue espectacular, con una escenografía vibrante y pantallas gigantes que permitían a todos los asistentes disfrutar del espectáculo sin impedimentos. Además, García estuvo acompañado por un elenco de músicos talentosos, incluyendo a Juan Carlos García en el teclado y Íñigo Goldaracena en el bajo, entre otros, quienes juntos crearon una atmósfera única para el disfrute de todos los presentes.
El repertorio fue una cuidadosa selección que incluyó desde canciones de sus más recientes álbumes, 'Mi Vida en Marte' y 'Desatinos Desplumados', hasta piezas icónicas de su etapa en solitario y con 'El último de la Fila'. Temas como 'Pájaros de barro' fueron interpretados en la pista, en un momento de conexión total con el público, que no dudó en acompañar cada verso.
Festival de luz y color
El concierto no solo fue un recital musical, sino también un espectáculo visual, con momentos destacados como el llenado del recinto con globos de colores durante la canción 'A San Fernando, un ratito a pie y otro caminando'. Tras una breve pausa, García regresó al escenario con renovadas energías, animando a los asistentes a "buscar la luz y la alegría" y a vivir el momento presente.
Con guiños a su pasado y miradas hacia el futuro, Manolo García demostró por qué sigue siendo una figura venerada en el panorama musical español. El concierto cerró con temas que hicieron vibrar a todos, culminando con 'Todo tiene su fin' y un homenaje a Pepe Robles de Los Módulos, prometiendo futuras colaboraciones.
Este concierto en Madrid no solo confirmó el estatus de García como uno de los artistas más destacados de España, sino que también reafirmó su compromiso con el activismo social y cultural a través de su música. Una noche que, sin duda, quedará grabada en la memoria de todos los asistentes.