Un preso intenta estrangular a un funcionario en la cárcel de Valdemoro dejando otros dos lesionados

Un interno del centro penitenciario de Valdemoro intentó estrangular ayer por la tarde a un jefe de servicios y causó lesiones a otros dos funcionarios, según han informado los sindicatos ACAIP-UGT y CSIF en sendos comunicados.
El incidente tuvo lugar en el módulo 8 de la prisión. Un recluso identificado como E.M.B. se abalanzó sobre otro preso y le propinó dos puñetazos en la cara. Al intentar intervenir los funcionarios de servicio para detener la agresión y separar al agresor del resto de la población reclusa, el interno se resistió. Al llegar a la puerta del patio, el mismo recluso se lanzó contra los funcionarios con la intención de agredirlos.
El jefe de servicios acudió rápidamente al lugar, momento en el que el agresor intentó estrangularlo utilizando la técnica conocida como "mataleón". Otros trabajadores del centro penitenciario lograron rescatar al jefe de servicios y separarlo del agresor. Durante el forcejeo, una empleada y otro empleado resultaron lesionados. Los tres afectados han requerido asistencia médica.
El pasado domingo, en la misma prisión, un funcionario fue agredido y otro amenazado de muerte durante una pelea entre presos, según informó CSIF Prisiones Valdemoro. El sindicato criticó que el agresor solo pasó 24 horas en aislamiento y no fue trasladado a otro centro penitenciario, sino al Módulo 9 de Valdemoro, donde se encontraría nuevamente con el funcionario agredido.
Los sindicatos han denunciado las políticas que consideran "buenistas" de las direcciones de los centros penitenciarios. CSIF argumenta que estas políticas están provocando una mala clasificación interior, lo que resulta en un aumento de agresiones y una falta de respeto hacia los funcionarios de prisiones, quienes no cuentan con la condición de autoridad, una formación adecuada ni los medios materiales necesarios.
Por su parte, ACAIP-UGT ha señalado la grave situación que se vive en la prisión de Madrid III, con la acumulación de presos conflictivos en determinados módulos, lo que genera incidentes continuos. El sindicato afirma que la clasificación interna no considera el perfil individual de cada reo y que se están ignorando aspectos fundamentales reconocidos en la legislación, como la separación entre internos preventivos y penados.
A estos problemas se suma el elevado número de presos con problemas mentales que conviven con el resto de la población reclusa y el déficit de la sanidad penitenciaria, con más del 65 por ciento de falta de médicos, según ACAIP-UGT. La combinación de internos multireincidentes, presos primarios y reos con tratamientos psiquiátricos en módulos conflictivos, como el módulo 8 de la prisión de Valdemoro, crea un entorno propicio para incidentes graves.
Ante esta situación, ACAIP-UGT exige que la clasificación y separación de los internos se ajuste a los perfiles individuales de los presos, se aplique la individualización científica que establece la ley y se cumpla el principio unicelular de un interno por celda. Asimismo, demandan soluciones al déficit sanitario en las prisiones españolas. Advierten que, de no tomarse estas medidas, la conflictividad en las cárceles españolas continuará aumentando, poniendo en riesgo la seguridad en los centros penitenciarios y resultando en consecuencias imprevisibles.