El ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, y también secretario general del PSOE de Madrid, Óscar López, ha anunciado este lunes su intención de optar a la Presidencia de la Comunidad de Madrid en las elecciones autonómicas de 2027.
En un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, López ha prometido un “gobierno para todos y para todas” y ha asegurado que su Ejecutivo, en caso de llegar al poder, no será “sectario”, en referencia al actual Gobierno presidido por Isabel Díaz Ayuso.
Durante su intervención, el dirigente socialista ha criticado con dureza lo que ha definido como “oposición al Gobierno de España desde las comunidades autónomas”, deslizando que algunas presidencias autonómicas estarían empleando sus competencias con fines partidistas. En esta línea, ha reivindicado un modelo de descentralización centrado, en sus palabras, en “mejorar la calidad de vida y acabar con las desigualdades”. López ha citado como ejemplo a Guillermo Fernández Vara, exlíder socialista en Extremadura, y ha lamentado lo que considera una falta de altura institucional por parte de los actuales responsables autonómicos.
Uno de los mensajes reiterados por el ministro ha sido la necesidad de recuperar lo que ha calificado como “revolución del respeto”, una forma de gobernar basada en el diálogo, el entendimiento entre instituciones y el rechazo al enfrentamiento constante. López ha reprochado a la presidenta Ayuso su estilo político, asegurando que “la política no se basa en salir corriendo o esconder el bulto” y acusándola de utilizar sus comparecencias públicas para atacar sistemáticamente al Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El ministro también ha alertado del incremento de episodios violentos contra sedes del PSOE en distintos puntos del país, así como de la proliferación de manifestaciones que ha calificado como “ultrafranquistas”. Ha asegurado que en los últimos meses se han producido hasta 150 ataques a sedes socialistas, incluido el más reciente en Rivas-Vaciamadrid. En su opinión, estos actos serían consecuencia de un clima político alimentado desde determinados sectores y ha reclamado responsabilidad a quienes, según él, contribuyen con su discurso al aumento de la tensión.
En materia económica y social, López ha centrado buena parte de su intervención en la cuestión de la vivienda, a la que ha calificado como “el principal problema de los madrileños”. Ha defendido la necesidad de “intervenir” el mercado del alquiler por tratarse, en su opinión, de un sistema “imperfecto” donde la oferta no satisface la demanda. Ha reclamado a la presidenta madrileña que aplique la Ley de Vivienda aprobada por el Gobierno central, afirmando que su puesta en marcha beneficiaría a más de un millón de ciudadanos.
También ha hecho referencia a la situación de las universidades públicas madrileñas, que a su juicio están “infrafinanciadas”, y ha criticado la nueva ley impulsada por el Ejecutivo regional, al considerar que “va contra la autonomía de los centros”. En este sentido, ha asegurado que su proyecto político pasa por “recuperar la buena política” frente a lo que ha definido como “populismo radical”.