La capital aprueba los planes directores de los parques del Retiro, Juan Pablo II y Fuente del Berro

La Mesa del Árbol del Ayuntamiento de Madrid tiene previsto aprobar este miércoles los planes directores de los parques del Retiro, Juan Pablo II y la Quinta de Fuente del Berro, tras un proceso de alegaciones en el que se han presentado un total de 527 escritos ciudadanos.
De estos, más de un centenar serán aceptados, según ha anunciado el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante. El Consistorio, además, ha expresado su disposición a incorporar sugerencias de los grupos municipales, entendiendo estos planes como herramientas de gestión fundamentales para la próxima década.
El Retiro contará con centro de visitantes y mejoras en accesibilidad
El Plan Director del parque del Retiro contempla la creación de un centro de atención al visitante, un espacio documental sobre la historia del recinto, una guía reguladora de ferias y un plan integral de accesibilidad. Esta planificación marcará criterios como la reducción y reciclaje de residuos, la eficiencia energética, el ahorro de agua y el diseño de un plan de movilidad orientado a personas con movilidad reducida. También establece medidas para proteger la biodiversidad, reducir la contaminación acústica y lumínica, y sensibilizar a los visitantes. Además, se definirán mecanismos de seguimiento y control sobre los actos que se celebren en el parque.
En lo que respecta a la accesibilidad universal, se desarrollará un plan basado en estudios previos que se implementará progresivamente en distintas zonas del jardín histórico. Este incluirá itinerarios adaptados que permitan el acceso a los puntos más emblemáticos, así como la adecuación del mobiliario, la cartelería y la señalética del recinto, todo ello respetando su carácter histórico.
La Quinta de Fuente del Berro restaurará su cascada y estudiará la ampliación del lago
En el caso de la Quinta de Fuente del Berro, el plan director impulsado por el Ayuntamiento de Madrid incluye la restauración de su cascada y la posibilidad de ampliar el lago existente. También se valora la incorporación de un puente y un embarcadero que recuperen la estética de los elementos recogidos en el archivo fotográfico histórico del parque. Con una extensión de 7,42 hectáreas, la finca está completamente cercada y tiene la consideración de Bien de Interés Cultural (BIC), lo que obliga a compatibilizar su uso público como parque urbano con la conservación de su valor histórico y artístico.
El plan propone un análisis detallado de todos los elementos hidráulicos del recinto, profundamente vinculado a la tradición madrileña de los viajes del agua. La iniciativa pretende modernizar y poner a punto su sistema hidráulico, así como elaborar catálogos con soluciones específicas para la mejora hidrogeológica del entorno.