Descenso de las okupaciones en la Comunidad de Madrid en el último año
Las ocupaciones ilegales de viviendas en la demarcación de la Policía Nacional en la Comunidad de Madrid han pasado de 2.500 en 2023 a 1.300 en 2024, lo que supone una reducción del 48%, según ha informado este lunes el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín
Los datos facilitados reflejan que en la actualidad hay 894 viviendas okupadas en la región, dentro de un parque inmobiliario que supera los 2,8 millones de inmuebles. A finales de 2023, la cifra ascendía a 1.825 viviendas ocupadas, lo que confirma la tendencia a la baja en este fenómeno.
El delegado del Gobierno ha destacado que el porcentaje de viviendas recuperadas ha pasado del 28% en 2023 al 33% en 2024, lo que supone un incremento de cinco puntos en la eficacia de las actuaciones policiales para devolver los inmuebles a sus propietarios.
Los datos del Ministerio del Interior indican que las okupaciones han descendido a nivel nacional durante los últimos dos años y que afectan a 15.289 viviendas en 2024, lo que representa solo el 0,057% del parque inmobiliario español, cifrado en 26,6 millones de inmuebles. Según estas cifras, el problema afecta a 5,7 personas por cada 10.000 habitantes, lo que el Gobierno considera un porcentaje reducido.
En la demarcación de la Guardia Civil, si bien se ha detectado un aumento en los allanamientos de morada en 2024, la rápida intervención policial ha permitido alcanzar una tasa de esclarecimiento del 77%, con la detención de los presuntos responsables en la mayoría de los casos.
Durante la presentación del Balance de Criminalidad de 2024 en Madrid, Francisco Martín ha reconocido que la okupación es un drama para quienes la sufren, pero ha criticado lo que considera una exageración interesada del problema por parte de algunos sectores con fines políticos y económicos.
"Advertí la semana pasada que la okupación real es la mitad que el año pasado. Cualquier caso obliga a trabajar conjuntamente para aliviar el sufrimiento de esas personas, pero los gestores tenemos que ser rigurosos y evitar generar alarma social innecesaria", ha señalado.
El delegado ha insistido en que los datos demuestran que la okupación está en retroceso en la Comunidad de Madrid, subrayando que aunque es un problema que no se puede banalizar, tampoco debe ser utilizado para alimentar el miedo entre los ciudadanos.
