Sánchez promete transparencia pero sigue sin aclarar las causas del apagón eléctrico

El Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reiterado este lunes su promesa de “prudencia, rigor y transparencia” para esclarecer las causas del reciente apagón eléctrico que afectó a amplias zonas del país. Sin embargo, pese a la gravedad del incidente y a las múltiples exigencias de explicaciones, el jefe del Ejecutivo ha vuelto a evitar concretar responsabilidades ni detallar el origen de la avería. “Nuestra voluntad es firme, queremos llegar hasta el final”, ha declarado durante la inauguración de la 40ª Reunió del Cercle d’Economia, que se celebra en Barcelona, sin aportar nuevos datos ni asumir autocrítica.
Un sistema supuestamente robusto que genera dudasSánchez ha defendido que el sistema eléctrico español es “robusto”, amparándose en la rapidez con la que se restableció el suministro tras el fallo. Pero este discurso choca con la creciente preocupación ciudadana y la desconfianza generada por un episodio que dejó sin servicio ferroviario y eléctrico a miles de usuarios. A día de hoy, el Gobierno continúa sin aclarar con precisión qué ocurrió ni por qué, ni ha depurado responsabilidades en Red Eléctrica o en el entramado institucional implicado.
Transición energética como cortina de humoEn lugar de asumir la urgencia de esclarecer los hechos, Sánchez ha aprovechado su intervención para volver a poner el foco en la “imprescindible transición energética”, obviando que esa transición no puede edificarse sobre un sistema cuya fiabilidad está hoy en entredicho. El presidente insistió en que el refuerzo del sistema se hará “atendiendo al interés general, no a ninguna agenda particular”, pero sin dar explicaciones sobre las medidas concretas que se adoptarán tras el apagón ni sobre los fallos de supervisión evidenciados.
Silencio institucional y falta de transparencia realMientras la ciudadanía continúa esperando respuestas claras, el Gobierno mantiene un discurso genérico sin avances sustanciales. La promesa de transparencia, reiterada por Sánchez, contrasta con la opacidad informativa de estos días. La falta de comparecencias técnicas, datos oficiales detallados o un calendario de investigación alimenta la percepción de improvisación y falta de control. El presidente se limitó a agradecer “el comportamiento ejemplar de la ciudadanía”, sin asumir responsabilidad política alguna por una crisis que evidencia la fragilidad de la infraestructura energética nacional.