El 91% de los españoles cree que la Inteligencia Artificial destruirá empleo

La Inteligencia Artificial (IA) genera en la sociedad española una combinación de inquietud y esperanza. El 91% de los ciudadanos cree que esta tecnología supondrá la pérdida de puestos de trabajo en los próximos años, aunque también se percibe como una herramienta con enorme potencial para el futuro. Así se recoge en el Observatorio Hostinger sobre la Transformación Digital 2025, que analiza la opinión pública sobre la evolución digital y su impacto laboral y social.
Según este informe, el 90,56% de los encuestados teme que personas de su entorno pierdan su empleo a causa de la inteligencia artificial en los próximos cinco años. Un 44,56% cree que los efectos se extenderán a una mayoría de trabajadores, mientras que un 46% opina que afectará únicamente a ciertos sectores concretos. Solo uno de cada diez considera que los trabajadores serán beneficiarios directos de este avance tecnológico.
La rapidez con la que evoluciona esta tecnología genera también un considerable grado de incertidumbre: un 30% no tiene claro si supondrá o no una amenaza, y un 25% considera que no destruirá puestos de trabajo. A pesar de ello, la percepción mayoritaria es que el impacto será negativo sobre el empleo, al menos a corto plazo.
Emprendedores y funcionarios, los más beneficiados
El informe señala que el reparto de los beneficios que aporta la IA es percibido como desigual. Un 42,44% considera que los principales beneficiados serán los emprendedores, seguidos de los funcionarios, con un 28,44%. En contraste, los trabajadores por cuenta ajena (17,67%) y los autónomos (11,44%) aparecen como los grupos con menos posibilidades de sacar partido de esta tecnología.
Walter Guido, responsable de Hostinger en España e Italia, apunta que “aunque la IA pueda generar preocupaciones razonables, su rápida expansión está abriendo una infinidad de nuevas oportunidades”. No obstante, los encuestados coinciden en que actualmente se prioriza la eficiencia empresarial frente al bienestar laboral.
Uso creciente pero confianza limitada en ciertos ámbitos
El uso cotidiano de la IA ya está presente entre los ciudadanos. Un 37,8% la utiliza para recibir recomendaciones de compra y un 22,4% opta por interactuar con chatbots en servicios de atención al cliente. Sin embargo, en ámbitos sensibles como la salud, la confianza disminuye notablemente: apenas un 6,33% confiaría en una inteligencia artificial para recibir un diagnóstico médico básico.
Además, un 33,4% declara evitar el uso de herramientas de IA, prefiriendo el trato exclusivamente humano. A pesar de ello, la mayoría de los encuestados —un 82,8%— cree que nunca es demasiado tarde para comenzar a utilizar este tipo de tecnologías.
El informe menciona soluciones como Kodee, el asistente de IA desarrollado por Hostinger, como ejemplos del potencial de esta tecnología para mejorar procesos, automatizar tareas repetitivas y crear empleo cualificado en sectores emergentes. A medio plazo, el reto será gestionar su implantación de forma equitativa, garantizando que los beneficios no se concentren en unos pocos y que el empleo evolucione, pero no desaparezca.