Detenido un policía municipal de Madrid en Torrejón tras estrangular a un magrebí que intentó robarle el teléfono

La víctima, un conocido delincuente local, falleció tras ser inmovilizado con una maniobra de estrangulamiento
Un agente de la Policía Municipal de Madrid fue detenido en la noche del martes en Torrejón de Ardoz tras verse implicado en la muerte de un hombre magrebí de unos 35 años, que supuestamente intentó robarle el teléfono móvil mientras caminaba por la vía pública de paisano.
Intento de robo en el casco antiguo
Los hechos ocurrieron sobre las 23:15 horas en las inmediaciones del número 20 de la calle Pesquera, en el casco antiguo de Torrejón. Dos agentes —uno en activo y otro jubilado— paseaban de paisano cuando fueron sorprendidos por dos individuos magrebíes, quienes trataron de sustraerles sus teléfonos móviles, según fuentes policiales.
Tras el intento de robo, los agentes persiguieron a los asaltantes. Uno de ellos fue alcanzado por uno de los policías, que lo inmovilizó con la técnica conocida como 'mataleón', utilizada en artes marciales y en intervenciones policiales, a la espera de la llegada de refuerzos.
Maniobras de reanimación fallidas
Cuando una patrulla de la Policía Nacional llegó al lugar, procedió a esposar al detenido, quien se hallaba en estado de semiinconsciencia. Minutos después, acudió una patrulla de la Policía Local de Torrejón de Ardoz, que intentó reanimar al hombre con un desfibrilador, dado que entró en parada cardiorrespiratoria.
A continuación, efectivos del SUMMA 112 prestaron asistencia médica durante cerca de 30 minutos, sin éxito. La víctima falleció en el lugar.
Investigación en marcha
Hasta la zona se desplazaron efectivos de la Brigada de Policía Científica y del Grupo V de Homicidios, que se ha hecho cargo de la investigación. Aunque no se ha precisado si el agente detenido es el que está en activo o el ya jubilado, las fuentes indican que ambos participaron en la intervención.
Según informaciones recabadas durante la investigación, el fallecido era un delincuente habitual en Torrejón de Ardoz, con antecedentes por robos y peleas, y presentaba un cuadro de toxicomanía. En los días previos, se había visto implicado en diversos altercados de menor entidad, motivo por el cual era considerado una persona conflictiva en la zona.