Una placa conmemorativa instalada en el número 20 de la calle Cartagena, en el distrito madrileño de Salamanca, recuerda desde este martes a Jesús Miguel Haddad Blanco, director general de Instituciones Penitenciarias durante la Transición y vecino del barrio, asesinado por la banda terrorista GRAPO en marzo de 1978. El acto, organizado por el Ayuntamiento de Madrid, contó con la presencia de autoridades municipales y familiares del homenajeado.
La delegada de Cultura, Turismo y Deportes, Marta Rivera de la Cruz, y la concejala de Salamanca, Cayetana Hernández de la Riva, acompañaron a los hijos y demás allegados de Haddad Blanco en un emotivo homenaje en el mismo punto donde fue asesinado hace más de cuatro décadas. La hija del fallecido agradeció el gesto institucional y destacó el valor simbólico de la placa, al asegurar que “la memoria no solo honra, también protege”.
Durante el acto, la familia recordó la figura de Jesús Miguel Haddad Blanco como un hombre comprometido con el servicio público, con un sentido profundo de justicia y entrega. En palabras de sus hijos, su asesinato fue un intento de “silenciar lo que representaba el esfuerzo por construir un país más justo, más seguro y más humano”, en referencia al difícil contexto de la Transición democrática en el que desempeñó su labor como director general de Instituciones Penitenciarias.
Los hijos del homenajeado quisieron dedicar también unas palabras a su madre, viuda del funcionario asesinado, quien asumió sola la crianza de la familia en medio del dolor. “Nos sacó adelante sola, completamente sola. Nos crió con amor, con valores y con una entereza que nunca será suficientemente reconocida”, subrayaron, reclamando que el recuerdo a las víctimas del terrorismo se extienda también al testimonio de vida de sus familiares.
En su intervención, Marta Rivera de la Cruz recordó que “la memoria es parte de la justicia, de la verdad, de la dignidad y de la reparación”, y defendió la necesidad de actos como este para transmitir a las nuevas generaciones lo que sucedió en España. “Me gustaría que cuando padres, madres y abuelos pasen por aquí puedan explicar a los niños lo que pasó en España hace mucho tiempo porque no podemos olvidarlo”, concluyó la delegada.