Las reformas de viviendas en Madrid se disparan en plena transformación urbana
Mientras el skyline de la capital sigue dominado por las grúas y los nuevos desarrollos verticales, hay una revolución mucho más silenciosa, pero igual de profunda, ocurriendo dentro de los hogares madrileños: las reformas integrales de viviendas.
La capital está viviendo uno de los mayores auges de rehabilitación residencial de las últimas décadas. Lo que comenzó como una necesidad ante los altos precios de la vivienda nueva, hoy es una auténtica tendencia que ha revalorizado barrios enteros, reactivado la economía local y transformado la manera en la que los madrileños viven sus hogares.
Una reforma cada 3 minutos
Según los últimos datos del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Madrid, cada tres minutos se inicia una reforma en una vivienda de la Comunidad de Madrid. El año 2024 cerró con más de 95.000 reformas registradas y 2025 va camino de superar ampliamente esa cifra.
Los motivos de este boom son múltiples. Por un lado, la escasez y el alto precio de la obra nueva en zonas céntricas hace que muchas familias y jóvenes compradores opten por adquirir pisos antiguos y reformarlos. Por otro, los fondos europeos Next Generation han impulsado numerosas ayudas para la rehabilitación energética, algo que ha sido clave para acelerar este movimiento.
Además, el cambio cultural en la forma de vivir tras la pandemia sigue haciendo efecto: los hogares han dejado de ser solo un lugar de paso y se han convertido en espacios de confort, trabajo, descanso y bienestar. Ya no basta con que una casa sea funcional; ahora debe ser bonita, eficiente y personalizada.
De piso antiguo a joya inmobiliaria
Los casos de éxito abundan. En barrios como Chamberí, Arganzuela, Carabanchel o Tetuán, las viviendas de más de 50 años, que antes eran descartadas por su antigüedad o mal estado, hoy son vistas como diamantes en bruto.
"Compramos un piso de 1960 por 170.000 euros en Cuatro Caminos. Invertimos 45.000 euros en una reforma integral con aislamiento térmico, nueva instalación eléctrica, cocina abierta y un segundo baño. Hoy está tasado en 260.000 euros. Es otra vivienda", explica Alba Serrano, arquitecta que realizó una renovación de su viviendas con una empresa de reformas integrales.
No es un caso aislado. Según la Asociación Nacional de Empresas de Rehabilitación y Reforma (ANERR), una reforma integral bien planificada puede aumentar el valor de un piso entre un 25% y un 45%, dependiendo de su ubicación y del estado previo.
Tendencias de reforma 2025: eficiencia y diseño inteligente
Los baños y cocinas siguen siendo las estancias más reformadas, pero el verdadero cambio está en el enfoque general. Las nuevas reformas no solo modernizan, transforman radicalmente la experiencia de habitar.
Entre las tendencias de reforma más demandadas en 2025 destacan:
Cocinas abiertas y multifuncionales: el corazón de la casa es ahora el punto de encuentro, adaptado al teletrabajo y la vida social.
Aislamiento térmico y ventanas eficientes: mejora energética como prioridad ante los nuevos certificados obligatorios.
Sistemas de climatización invisibles y sostenibles: aerotermia, suelo radiante y ventilación cruzada natural.
Domótica: persianas, luces y calefacción controladas por voz o desde el móvil.
Baños tipo hotel: diseño minimalista, iluminación LED, materiales nobles y duchas de efecto lluvia.
Reformar no es barato… pero es rentable
Aunque los precios de las reformas han subido un 15% respecto a 2022 debido al encarecimiento de materiales y mano de obra, los madrileños ven la reforma como una inversión, no un gasto. El coste medio de una reforma integral en la capital ronda los 52.000 euros para una vivienda de 90 metros cuadrados, pero la revalorización suele superar los 70.000 euros en la mayoría de los casos.
“Hay una rentabilidad directa, pero también una ganancia emocional. Reformar tu vivienda te da calidad de vida, eficiencia energética y mejora tu salud mental”, asegura Miguel Soto, interiorista y director de una de las empresas de reformas más solicitadas de Madrid.
Mano de obra cualificada: escasa y muy demandada
Uno de los cuellos de botella del sector sigue siendo la falta de profesionales. Albañiles, fontaneros, electricistas y técnicos especializados están desbordados de trabajo. Algunos profesionales tienen lista de espera de 6 meses.
"Es el mejor momento para estar en la construcción desde hace 20 años", comenta Manuel García, jefe de obra de una empresa familiar que ha triplicado su plantilla desde 2023. “El reto ahora es formar gente joven y darles estabilidad. Hay más trabajo que manos”.
La Comunidad de Madrid ya ha anunciado un plan de formación exprés para cubrir la demanda, con cursos gratuitos y prácticas remuneradas para jóvenes sin empleo.
