La Fundación Franco acusa al Gobierno y al PP de "abuso de poder" por apoyar su disolución

La Fundación Francisco Franco ha criticado duramente al Gobierno de PSOE y Sumar, así como al Partido Popular, tras la votación en el Congreso a favor de debatir una iniciativa que busca disolver organizaciones que glorifiquen el franquismo y humillen a sus víctimas. La fundación ha calificado esta medida como una "arbitrariedad" y un "abuso de poder", en un comunicado emitido el día después de la votación.
En su mensaje, la fundación ha arremetido contra el Ejecutivo, describiéndolo como "un gobierno de incapaces, resentidos de manual y avaros de poder", al que acusa de fomentar el "odio interesado y cainita" en la sociedad. Sin embargo, sus críticas más contundentes fueron dirigidas hacia el Partido Popular, al que acusa de sumarse a lo que consideran una "manifiesta ilegalidad", a pesar de contar con una amplia mayoría en la Cámara Baja.
Apoyo parlamentario y críticas a la votación
La votación en cuestión es la toma en consideración de la ley promovida por el PSOE para reformar la Ley Reguladora del Derecho de Asociación, que permitiría ilegalizar entidades que ensalcen el franquismo. Esta medida fue apoyada por la mayoría de los grupos parlamentarios, incluidos PSOE, Sumar y el PP, mientras que VOX fue el único partido que votó en contra.
La Fundación Franco agradeció a los diputados de Vox, liderados por Santiago Abascal, por su oposición a la medida, describiéndolos como "valientes, honestos y coherentes" en su defensa de lo que ellos consideran "la verdad histórica".
Acusaciones de arbitrariedad y distorsión histórica
En su comunicado, la fundación denunció que con esta medida se está "legalizando la arbitrariedad" y "legitimando el abuso de poder", acusando a los legisladores de socavar los cimientos de su propia función. Además, volvieron a criticar la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos en 2019, que consideran parte de una campaña en contra de su visión de la historia.
La Fundación Franco aseguró que su única misión es "recordar lo ocurrido en la Historia de España" y preservar lo que consideran una realidad histórica objetiva, al tiempo que advirtieron que seguirán defendiéndose ante cualquier intento de ilegalización.