Descubren en Mongolia un fósil de un mamífero desconocido del Cretácico Superior

Un fósil perteneciente a un género y especie de mamífero previamente desconocidos ha sido descubierto en estratos del Cretácico Superior, en el desierto de Gobi, Mongolia. El animal, del tamaño de un ratón, ha sido denominado Ravjaa ishiii, en homenaje al monje budista del siglo XIX Dulduityn Danzanravjaa y al difunto Kenichi Ishii, exdirector del Museo de Ciencias Naturales de Hayashibara.
El hallazgo, publicado en la revista Acta Palaeontologica Polonica, es fruto de una expedición conjunta en 2019 liderada por investigadores de la Universidad de Ciencias de Okayama (OUS) y del Instituto de Paleontología y Geología de la Academia de Ciencias de Mongolia (IPMAS). El equipo localizó un diminuto fragmento de mandíbula inferior, de apenas un centímetro, en la Formación Baynshire, uno de los yacimientos fósiles más importantes del desierto de Gobi.
Un hallazgo que reescribe el conocimiento sobre mamíferos del Cretácico
El análisis del espécimen ha determinado que pertenece a la familia Zhelestidae, un grupo de mamíferos conocidos por habitar principalmente las antiguas zonas costeras durante el Cretácico. Sin embargo, los molares excepcionalmente altos y la forma peculiar de la mandíbula diferenciaron a Ravjaa ishiii de sus parientes conocidos, lo que ha llevado a establecer un nuevo género y especie.
Este descubrimiento representa el primer registro de un zhelestidae en Mongolia, sugiriendo que estos pequeños mamíferos también prosperaron en regiones interiores, no solo en áreas litorales, como se creía hasta ahora. La robustez de los molares se asemeja a la de los mamíferos especializados en el consumo de semillas y frutos, lo que ofrece nuevas perspectivas sobre la dieta de los primeros euterios y su relación con la expansión de las plantas con flores en los ecosistemas terrestres de la época.
Un testimonio de la biodiversidad del desierto de Gobi
Tsukasa Okoshi, autor principal del estudio y candidato a doctorado en la OUS, ha señalado que, a pesar de los retrasos provocados por la pandemia de Covid-19, "finalmente pudimos establecer la importancia científica de este espécimen". Asimismo, expresó su esperanza de que esta investigación sirva como punto de partida para futuros estudios sobre la biodiversidad de pequeños vertebrados que habitaron el desierto de Gobi durante la era de los dinosaurios.
El profesor Mototaka Saneyoshi, también de la OUS, ha destacado la dificultad de encontrar un fósil tan diminuto en una extensión tan vasta como el desierto de Gobi, calificándolo como "prácticamente un milagro".
El descubrimiento de Ravjaa ishiii añade una pieza crucial al conocimiento sobre la evolución temprana de los mamíferos y subraya la riqueza paleontológica del desierto de Gobi, un enclave que continúa revelando tesoros científicos de valor incalculable.