Riesgo extremo de incendios en toda la Comunidad de Madrid

Desde este miércoles, la Comunidad de Madrid enfrenta un riesgo extremo de incendios debido al aumento de las temperaturas y a un incremento en la velocidad del viento, sumado a la vegetación seca característica de esta época del año.
El consejero de Medio Ambiente, Interior y Agricultura, Carlos Novillo, anunció en un encuentro informativo que, a pesar de un verano relativamente tranquilo en cuanto a incendios gracias a temperaturas moderadas, la situación cambiará drásticamente. A partir de mañana, una dorsal africana traerá altas temperaturas, sequedad y vientos a la Península Ibérica, lo que, junto al estrés hídrico de la masa forestal, podría provocar incendios significativos.
La Agencia Estatal de Meteorología ha emitido una alerta amarilla para la zona central y sur de la región, que se elevará a naranja el jueves, con pronósticos de temperaturas de hasta 39 grados.
"Esperamos que los bomberos no tengan que salir de sus bases. Hago un llamamiento a la colaboración ciudadana para evitar tragedias", expresó Novillo.
Reducción de incendios en 2023
El Plan de Protección Civil contra Incendios Forestales (INFOMA) logró una campaña histórica en 2023, reduciendo los incendios en más del 60% en comparación con el año anterior. Durante los meses de mayor riesgo, solo ardieron 26,49 hectáreas, de las cuales apenas un 8% correspondieron a superficie arbolada. El 92% de los incidentes fueron simples conatos, afectando menos de una hectárea.
Este año, la campaña sigue la misma tendencia positiva, con una reducción del 50% en el número de siniestros respecto a la última década y una disminución del 65% en la superficie afectada. Hasta el momento, solo se han registrado 75 incendios, de los cuales 61 han sido conatos, superando ampliamente la media nacional.
En lo que va del verano, han ardido 150 hectáreas, un 60% menos que el promedio de años anteriores. "Madrid realiza la inversión más importante de Europa por hectárea en extinción y prevención de incendios forestales", destacó Novillo.
Entre las medidas implementadas, el consejero mencionó las ayudas para el mantenimiento de dehesas y la promoción de actividades agrícolas y ganaderas, evitando que las masas forestales se conviertan en pastos y arbustos que favorezcan la propagación de incendios. La abundante lluvia de la primavera ha contribuido al crecimiento vegetativo, aumentando el riesgo de incendios.