La Comunidad de Madrid evalúa a 280.000 alumnos en Primaria y ESO

Unos 280.000 alumnos de Educación Primaria y Secundaria de la Comunidad de Madrid participan desde este lunes y hasta mañana martes en las pruebas externas de evaluación de conocimientos impulsadas por el Gobierno central mediante la LOMLOE y ampliadas por el Ejecutivo autonómico. Las evaluaciones se realizarán en los cerca de 3.000 centros educativos madrileños, incluyendo colegios e institutos públicos, concertados y privados.
Los estudiantes evaluados pertenecen a 4º y 6º de Primaria, así como a 2º y 4º de la ESO. En Primaria, se valorará el dominio en Lengua Castellana y Literatura, Inglés, Matemáticas y Ciencias Sociales; mientras que en Secundaria se evaluarán las mismas materias, sustituyendo Ciencias Sociales por Geografía e Historia. Esta es la segunda edición de las pruebas en su formato actual, tras ser aplazadas a causa del apagón eléctrico nacional que obligó a suspender la jornada lectiva del pasado 29 de abril.
La Comunidad de Madrid justifica la ampliación de estas pruebas como una herramienta para reforzar la calidad educativa, evaluando no solo cursos intermedios sino también el cierre de etapa, con el propósito de identificar debilidades estructurales en el aprendizaje y planificar mejoras. El Ejecutivo autonómico insiste en que los resultados permitirán orientar mejor los recursos y las políticas educativas.
El desarrollo de las pruebas llega envuelto en un fuerte rechazo por parte de los principales sindicatos educativos y colectivos docentes. CC.OO., CSIF, UGT, ANPE y la asamblea Menos Lectivas coinciden en considerar estas evaluaciones como una carga añadida innecesaria para los docentes, que deben encargarse de tareas administrativas adicionales —como la impresión, corrección y grabación de resultados— sin compensación horaria ni económica.
CC.OO. ha convocado una huelga para los días de las pruebas, que se desarrollará con servicios mínimos decretados por el Gobierno regional. En Infantil y Primaria, se exige un maestro por cada 50 alumnos, más uno por unidad de 4º y 6º de Primaria. En Secundaria, habrá al menos un profesor por cada 90 alumnos, más uno por unidad de 2º y 4º de la ESO.
La asamblea Menos Lectivas ha criticado duramente el modelo de evaluación empleado, que considera “una foto fija fuera de contexto”, con contenidos que a menudo no han sido impartidos aún, y sin reflejo real del aprendizaje continuo. Además, advierten del riesgo de que estas pruebas deriven en clasificaciones por centros que ahonden en la segregación educativa.
Desde UGT y CSIF se ha reclamado que las evaluaciones solo puedan mantenerse si se aplican en formato voluntario y van acompañadas de retribuciones adecuadas y garantías de que no supondrán una carga adicional en plena recta final del curso académico.