El Teatro Albéniz reabrirá sus puertas en 2019 como un hotel de cinco estrellas

El Teatro Albéniz volverá a abrir sus puertas en el primer semestre de 2019 como un hotel de cinco estrellas de la cadena Iberostar Hotels & Resorts, que mantendrá en su interior la sala y el escenario al estar protegido como Bien de Interés Patrimonial (BIP).
Será el segundo hotel que la cadena mallorquina abre en Madrid -el primero fue el de Las Letras, en la Gran Vía-, que contará "con una oferta de ocio única e innovadora alrededor de un gran teatro ubicado en su interior", según ha confirmado la compañía.
Situado en una parcela de 1.377 metros en el número 11 de la calle de la Paz, que también ocupa el antiguo Hotel Madrid, la declaración como BIP en 2016 por su valor arquitectónico y artístico obliga a que la sala, el escenario, los accesos a los tres niveles del teatro y las escaleras se mantengan.
Esta declaración tiene una significación especial que merece un reconocimiento y una protección (nivel intermedio), respecto al resto de bienes de Patrimonio Histórico (cuenta con ONCE esculturas de Ángel Ferrant y una pintura mural de Javier Clavo), aunque el bien no cuente con valores excepcionales.
Sin esta protección, el Ayuntamiento de Madrid estaría obligado a conceder la licencia de demolición total o parcial si así la solicitaran sus dueños.
Desde diciembre de 2008 el Teatro Albéniz no tiene uso, cuando la Comunidad de Madrid canceló el contrato de alquiler del edificio como sede principal de la programación teatral y operística del Festival de otoño de Madrid, con la inauguración de los Teatros del Canal.
La empresa de gestión de patrimonios Mazabi compró en 2016 en inmueble, que ha tenido distintos usos culturales a lo largo del tiempo durante las primeras décadas del siglo XX, para continuar como el cine en los años 30.
Tras el paréntesis de la Guerra Civil, el empresario Máximo Moro concibió en 1942 un proyecto flexible de sala de teatro, cine, variedades, teatro musical y sala de fiestas en un complejo que incluía también oficinas, viviendas y un hotel, que se inauguró en 1945.
A partir de 1954, con el auge del cine en color, se convirtió en una de las salas mejor equipadas, y se alternó el cine y el teatro, junto con el de una sala de fiestas en el sótano, hasta 1984.
Un año después la familia Moro decidió recuperar el edificio como teatro y en 1986 la Comunidad de Madrid arrendó el edificio como sede principal de la programación teatral y operística del Festival de Otoño de Madrid hasta diciembre de 2008, cuando canceló el contrato con la apertura de los Teatros del Canal.
La cadena hotelera ha subrayado que este nuevo establecimiento "se enmarcará dentro del segmento de hoteles de ciudad de la cadena hotelera, que reúne establecimientos en ubicaciones privilegiadas y edificios únicos en el corazón de ciudades con gran atractivo turístico".
Para Iberostar esta apertura refuerza su apuesta "por el segmento urbano y su compromiso con la excelencia, respondiendo a la política estratégica de la compañía de invertir en la transformación y desarrollo de nuevos productos y servicios que permitan ofrecer los más altos estándares de calidad, innovación y sostenibilidad".