El Hospital Gregorio Marañón implementa una innovadora técnica 3D para visualizar tejidos y órganos sin cortes
El Hospital Gregorio Marañón, ubicado en la Comunidad de Madrid, ha implementado una avanzada técnica de clareado óptico que permite observar el interior de tejidos y órganos en tres dimensiones (3D), sin necesidad de seccionarlos.
Esta tecnología innovadora proporciona una visión completa de la estructura interna de los tejidos, lo que supone un gran avance en el campo de la investigación biomédica.
La clave de este avance radica en la automatización del proceso, lograda por los investigadores del hospital, lo cual posibilita la manipulación simultánea de múltiples muestras tras hacerlas transparentes. Gracias a la utilización de microscopios de alta resolución, estas muestras pueden ser analizadas de manera más rápida y eficiente en comparación con el método manual anteriormente empleado.
Esta tecnología permite visualizar detalles con gran precisión, como el recorrido completo de los vasos sanguíneos, incluyendo sus ramificaciones y distribución. En el caso de los estudios cerebrales, facilita la observación detallada de la longitud y las bifurcaciones de cada neurona, no solo las que se encuentran en un plano específico de corte.
El principal objetivo de esta técnica es mejorar la precisión diagnóstica en la práctica médica diaria, ya que proporciona una información más detallada y exhaustiva sobre la estructura de los órganos. El procedimiento consiste en la preparación de una mezcla de reactivos que elimina los lípidos, los cuales son responsables de la opacidad de los tejidos, permitiendo así su visualización en 3D.
Actualmente, esta tecnología se emplea en la investigación preclínica y ha mostrado su eficacia en el análisis de materiales biológicos en laboratorio. Esto permite evaluar la respuesta de los tratamientos y facilita el desarrollo de nuevos medicamentos al estudiar su impacto en órganos completos afectados por diversas enfermedades.
Este importante avance ha sido posible gracias a un acuerdo de licencia firmado entre la Fundación de Investigación Biomédica del hospital Gregorio Marañón y la empresa Plane Light, permitiendo así que la sanidad pública madrileña disponga de esta tecnología puntera para el beneficio de la investigación y la práctica médica.
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