¿Qué ver y hacer en El Boalo?

El Boalo, también conocido como El Boalo-Cerceda-Matalpino, es un municipio español, situado en la parte noroeste de la comunidad autónoma de Madrid, al pie de la vertiente sur de la Sierra de Guadarrama.

El término municipal tiene una superficie de 39,59 km² e incluye tres núcleos de población: El Boalo, Cerceda y Mataelpino. Los orígenes de las tres unidades de población que hoy forman el municipio de El Boalo se remontan a la época de la Reconquista, en el contexto del proceso de repoblación llevado a cabo por la Comunidad de Villa y Tierra de Segovia, en la vertiente sur del Guadarrama.

Las primeras referencias escritas a Cerceda y Mataelpino aparecen a principios del siglo XIII, mientras que las del núcleo de El Boalo datan del siglo XV. Este último lugar se menciona en una de las serranillas del Marqués de Santillana (1398-1458): 'Bajando Yelmo ayuso, tirando contra Boalo, en aquel valle de Suso, vi a serrana cantando'.

En la Alta Edad Media, la zona de influencia del curso alto del río Manzanares, conocida como Real de Manzanares, fue objeto de constantes disputas entre las comunidades de Villa y Tierra de Segovia y Madrid, que pretendían hacerse con el control de sus tierras, abundantes bosques y praderas.

Las disputas fueron resueltas en el siglo XIV por el rey Juan I de Castilla (1358-1390), quien cedió el territorio a Pedro González de Mendoza. Desde entonces, El Boalo, Cerceda y Mataelpino han estado vinculados a la Casa de Mendoza y al Ducado del Infantado, junto con otras ciudades de Guadarrama.

Los lugares que no te debes perder en una escapada a El Boalo

El monumento más importante del municipio es la Iglesia de Nuestra Señora La Blanca, situada en Cerceda, declarada Monumento Histórico-Artístico. Alberga una pila bautismal renacentista y due construida en estilo gótico en el siglo XVI. Es de mampostería de granito, a excepción de la sacristía, levantada con cantería ordinaria de color azul.

En el núcleo de El Boalo destaca la Iglesia del Mártir de San Sebastián, que data del siglo XVII; y en Mataelpino la Iglesia de Santa Águeda, cuyo origen probablemente se remonta al siglo XVI, aunque el edificio actual fue construido en el siglo XX.

Otra construcción interesante es la ermita de San Isidro Labrador, construida en el siglo XX en estilo rústico. A orillas del río Samburiel se conservan los restos arqueológicos de un túmulo funerario del Neolítico, descubierto a principios del siglo XXI. Además de restos arqueológicos del Neolítico, también hay tumbas de origen visigodo del siglo VII en Cerrillo del Rebollar y un cementerio medieval en Arroyo del Cerrillo.

La ermita de El Boalo es una de las más famosas de la sierra, porque está rodeada de campos y un hermoso río, es un paisaje muy bonito. En el término municipal existen varias áreas recreativas, entre ellas la de San Isidro Labrador, además de la ermita del mismo nombre.

Otros enclaves de interés ecológico y recreativo son la Gruta de la Calera, situada en una zona sedimentaria formada por el río Samburiel, y el Mirador de la Ponzonilla, a 1.175 m de altitud.