El Atleti volvió a ser el de “siempre”

La noche se presentaba con una temperatura asequible para que la afición rojiblanca silenciase a los Reds Evils que se habían desplazado hasta la capital. El nombre propio por encima de todos era el de Cristiano Ronaldo, la bestia negra de los rojiblancos y el segundo equipo que mejor se le dio al portugués en su estancia en la liga española -el conjunto más goleado en su época merengue fue el Sevilla-. 

El juego de los del Cholo era un guion clavado a otros tiempos en los que los colchoneros apostaban por la solidez defensiva y la clarividencia goleadora de alguna de sus estrellas. 

El Manchester estaba agazapado en su campo y abogaba por las incursiones de CR y de Bruno Fernándes. Sancho, a pesar de ser una de las granas apuestas de los de Rangnick, está funcionando como se esperaba. 

Pogba intentaba dominar la medular, pero el bloque rojiblanco moviéndose al unísono junto a Kondogbia, les daban pocas opciones a los ingleses. 

Llegaba el minuto 6 de partido y el Atleti ya había mostrado sus credenciales, sus intenciones era claras y concisas hacia la portería de los de la Premier. Lodi galopaba con el punto de mira clavado en un portugués que desprendía hambre en cada zancada que daba. El extremo regaló un caramelo que esperaba el lusitano con babero incluido para alojar el balón en el fondo de las mallas. Su cabeza empujó el esférico con decisión, colocación y fiereza. 

Los de Cholo ya tenían escrita parte de la partitura que tantas veces les hizo disfrutar de conciertos ante los suyos, ahora quedaba esperar, salir rápido y defender en bloque bajo y sin fisuras.

Kondogbia ataviado con sus mejores galas decidió que iba a ser su noche, nadie podía pasar acompañado del esférico, la invitación era solo para uno, o el balón o el jugador.

Los ingleses martilleaban, pero sin casi hacer ruido -todo lo contrario que habían hecho sus aficionados en las calles madrileñas-. El respeto y el titubeo estaban siendo la marca y seña de los visitantes.

Rashford se quería subir al tren de las buenas intenciones, pero no le valía por mucho que lo intentara. Mientras tanto, Vrsaljko soñó con marcar, pero el poste le impidió seguir en estado onírico.

Llegaba el final de la primera mitad con la victoria por la mínima. La sonrisa nerviosa del Cholo solo denotaba alegría. Era el plan prefijado.

Segunda mitad, los del Cholo salían más arriba y con presión más ambiciosa:; el Manchester, por su parte, apostaba por la velocidad y la pegada que tenían en zona de tres cuartos.

La embestidas de los ingleses se solventaban con sencillez y silencio; ningún grito innecesario para no perder fuerzas. 

Todo iba bien, el futuro era esperanzador para los madrileños. El segundo acto solo destacan un jugador que entraba al terreno de juego: Elanga. El canterano ya venía de triunfar en la competición doméstica y hoy quería hacer lo mismo. Un pase de línea de Bruno fue aprovechado por Elanga, merced a un regalo de Reinildo, para que con calidad y precisión batiera a Oblak (min. 79). La definición es de crack, de esos que todos sueñan con tener en el equipo.

A partir de aquí llegaron los nervios de uno y otro. Griezmann, que salió en la segunda parte, quería liarla. Sus sonrisa pícara así lo señalaba. Un golpeo magistral que impactó en el larguero hizo que el estadio gritará de emoción, pero no pudo ser.

El final del encuentro fue un cúmulo de nervios e imprecisiones. Los dos equipos querían más. Eso sí, el Cholo pedía tranquilidad desde el área técnica, un empate con la nueva legislación no está nada mal. 

Final del partido y empate a uno. Manchester espera, pero con el mismo miedo que respeto, a partes iguales. Ocho veces conseguimos los octavos en nueve años no es mala noticia. 

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Oblak, Savic, Giménez m, Reinildo, Vrsaljko, Lodi (76 min. Lemar), Kondogbia, Llórente, Herrera, Correa, Joao Félix (76 min. Griezmann) 

De Gea, Lindelof (66 min. Wan-Bissaka), Varane, Maguire, Shaw (67 min. Telles) Pogba (66 min. Matic), Rodrígues, Rashford (75 min. Elanga), Sancho (80 min. Lingard), Fernándes, Cristiano

Goles min. 6 Joao, min. 79 Elanga.

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