Madrid será la sede de la final de la Copa Libertadores entre River y Boca

Madrid será la sede de la final de la Copa Libertadores entre River y Boca

Madrid salió al rescate este jueves del histórico encuentro entre River Plate y Boca Juniors, por la final de la Copa Libertadores 2018, que se jugará en el estadio Santiago Bernabéu y se convirtió en la plaza ideal para la Conmebol.


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Los jugadores de River y Boca cambiarán el césped del argentino estadio Monumental, donde se iba a jugar el pasado 24 de noviembre, por el campo del Real Madrid, donde se disputará finalmente el 9 de diciembre a las 20.30 hora española, según anunció hoy el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez.

Cabe recordar que el partido de vuelta por la final del torneo programada para el 24 de noviembre se pospuso porque hinchas del equipo local atacaron el autobús que transportaba a los jugadores del Xeneize al Monumental y lastimaron a algunos de ellos.

En el compromiso de ida igualaron 2-2 en la Bombonera.

La propuesta del Bernabéu surgió del presidente del Real Madrid, Florentino Peréz, quien tras una "charla personal" con Domínguez puso el estadio merengue a disposición del fútbol sudamericano.

Domínguez se decantó por la capital española por su "gran cultura y tradición de fútbol", además de por la seguridad que ofrece y de la conectividad de su aeropuerto con Sudamérica.

Al margen de las cuestiones logísticas, el presidente de la Conmebol también aludió a las cuestiones sentimentales y reconoció que la importante presencia de argentinos en Madrid pesó a la hora de la elección de la nueva sede del partido.

Por eso, el Bernabéu abrirá sus puertas a las hinchadas de River y Boca, que esperan acudir al encuentro para transmitir su calor a los jugadores, ya que con el cambio de hemisferio los futbolistas aterrizarán en un Madrid invernal.

La capital española tendrá ahora el honor de convertirse en la pacificadora del fútbol sudamericano al acoger la última definición de la Copa Libertadores con partidos a ida y vuelta, pues el próximo año tendrá final única en Santiago de Chile; y de albergar un encuentro que se muestre como "una fiesta deportiva".

Uno de los mayores eventos deportivos de Sudamérica se jugará de manera puntual en Europa, con lo que los dos continentes fijarán su atención en Madrid ese 9 de diciembre, algo que no pasa inadvertido para Domínguez.

"Queremos recordarle a Sudamérica y al mundo que el fútbol se puede y se debe vivir en paz, y que la pasión deportiva y el respeto por el rival son valores complementarios que pueden coexistir", comentó el presidente de la Conmebol hoy en la rueda de prensa en la que informó la fecha y el lugar de la final.

Las palabras de Domínguez corroboraron una hipótesis que empezó a cobrar fuerza a lo largo del jueves, la del Bernabéu como sede de la final de la Libertadores 2018.

El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, se adelantó a la confirmación de la Conmebol con la publicación de un tuit en el que daba su aprobación para la celebración del partido en el campo 'vikingo'.

La elección de Madrid no estuvo ajena a las críticas y varias voces se cuestionaron los motivos que llevaron a la Conmebol a trasladar a los dos equipos argentinos a España.

Domínguez negó que respondiera a cuestiones económicas y adelantó que el dinero que sobre de la organización se destinará a un fondo para la creación de una fundación que ponga fin a la violencia que rodea al fútbol en Sudamérica, tanto en la cancha como fuera de ella.

Esa violencia fue la que provocó la suspensión del partido el pasado sábado y fue condenada este jueves por el Tribunal de Disciplina de la Conmebol, que sancionó a River Plate con una multa de 400.000 dólares y dos partidos como local a puerta cerrada en el 2019.

Por el momento, Argentina no volverá a albergar la final de la Copa Libertadores, ya que la de 2019 se jugará en Santiago de Chile en una final única, como anunció la Conmebol.

Hasta entonces, la Copa Libertadores de América se jugará en Europa y el ganador llevará el trofeo "de Madrid al cielo".